El joven futbolista Lamine Yamal, de tan solo 17 años, ha compartido cómo organiza su día durante el mes del Ramadán, un periodo sagrado para los musulmanes que implica ayuno desde el amanecer hasta el atardecer. Según detalló en una entrevista con el diario As, el jugador del FC Barcelona y de la Selección Española comienza su jornada a las 4:00 de la mañana, momento en el que toma un desayuno temprano que también funciona como su última comida antes de iniciar el ayuno diario. Este año, el Ramadán coincide casi completamente con el mes de marzo, lo que ha llevado a Yamal a ajustar su rutina para compaginar sus compromisos religiosos con las exigencias del fútbol profesional.
Durante la entrevista, Yamal explicó que su desayuno incluye una pastilla de electrolitos disuelta en agua, diseñada para mantenerlo hidratado durante el día. “Es una pastilla con agua que me tomo a las 4 de la mañana que te hidrata durante el día. Al final yo entreno y se te seca la garganta, tienes mucha sed”, comentó el futbolista. Tras este desayuno, regresa a la cama para descansar un poco más antes de iniciar su jornada de entrenamientos y actividades con el equipo.
La rutina diaria de Lamine Yamal durante el Ramadán está cuidadosamente estructurada para cumplir con sus obligaciones religiosas y deportivas. Después de levantarse más tarde que sus compañeros, ya que no necesita desayunar nuevamente, el jugador asiste a los entrenamientos y regresa a su habitación, donde dedica tiempo a rezar y a actividades tranquilas como revisar su teléfono móvil. “No hago nada más hasta la hora que puedo romper el ayuno”, explicó.
El compromiso de Yamal con el ayuno no solo afecta su rutina diaria, sino también su desempeño en el campo. El pasado 11 de marzo, durante un partido contra el Benfica, el árbitro detuvo el encuentro a las 19:00 horas, justo después de la puesta de sol en Barcelona, para permitir que los jugadores musulmanes rompieran su ayuno. Esta medida, autorizada por la UEFA, permitió a Yamal y a otros futbolistas hidratarse y alimentarse brevemente antes de continuar con el partido.
Actualmente, Lamine Yamal se encuentra concentrado con la Selección Española para disputar los cuartos de final de la Liga de Naciones frente a Países Bajos. El primer partido de esta eliminatoria está programado para el jueves 20 de marzo. Según informó As, el equipo se encuentra entrenando a puerta cerrada en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas, en Madrid, como parte de su preparación para este importante encuentro.
El joven jugador, nacido en Esplugues de Llobregat, Barcelona, ha destacado por su madurez tanto dentro como fuera del campo. Este es su primer Ramadán desde que superó la pubertad, un momento significativo en la vida de los musulmanes, ya que marca el inicio de la obligación de cumplir con el ayuno. A pesar de su corta edad, Yamal ha demostrado una notable capacidad para equilibrar sus responsabilidades religiosas con las demandas de su carrera profesional.
El impacto del Ramadán en el fútbol profesional
El caso de Lamine Yamal pone de relieve cómo los futbolistas musulmanes adaptan sus rutinas durante el Ramadán para mantener su rendimiento en el más alto nivel. La práctica del ayuno puede ser un desafío físico, especialmente para aquellos que participan en deportes de alta intensidad como el fútbol. Sin embargo, medidas como las pausas autorizadas por la UEFA para romper el ayuno durante los partidos reflejan un esfuerzo por respetar y apoyar la diversidad cultural y religiosa en el deporte.
La experiencia de Yamal también subraya la importancia de la planificación y el apoyo médico en estos casos. La inclusión de una pastilla de electrolitos en su dieta matutina es un ejemplo de cómo los deportistas pueden utilizar estrategias nutricionales para mitigar los efectos del ayuno en su rendimiento físico. Este tipo de adaptaciones son esenciales para garantizar que los jugadores puedan cumplir con sus compromisos religiosos sin comprometer su salud ni su desempeño en el campo.
Lamine Yamal y el Ramadán
La historia de Lamine Yamal durante el Ramadán es un testimonio de su dedicación tanto a su fe como a su carrera deportiva. A pesar de las dificultades que implica el ayuno, el joven futbolista ha encontrado formas de adaptarse y seguir destacando en el exigente mundo del fútbol profesional. Su experiencia no solo inspira a otros jóvenes deportistas, sino que también pone de manifiesto la importancia de la comprensión y el respeto hacia las diferentes tradiciones culturales y religiosas en el ámbito deportivo.
Yamal continúa demostrando su compromiso con el FC Barcelona y la Selección Española, mientras mantiene su fe como una parte integral de su vida. Con apenas 17 años, el jugador catalán se perfila como una de las grandes promesas del fútbol español, mostrando que el equilibrio entre la religión y el deporte es posible con disciplina y apoyo adecuado.
