Marat Safin, quien alcanzó el número uno del mundo en el tenis masculino en el año 2000, no solo dejó una huella imborrable en las pistas, sino que también ha tenido una vida marcada por giros inesperados. El extenista ruso, conocido por su imponente físico y su carácter explosivo, pasó de ser una estrella del deporte a ocupar un lugar en la política de su país natal, Rusia. Además, en los últimos años, ha llamado la atención por sus declaraciones relacionadas con teorías de conspiración.
Nacido el 27 de enero de 1980 en Moscú, Marat Mubínovich Safin creció en una familia vinculada al tenis. Su hermana menor, Dinara Safina, también alcanzó el número uno del mundo en la WTA, lo que convierte a los Safin en una de las pocas familias en la historia del tenis en lograr este hito en ambas ramas del deporte.
Antes de alcanzar la cima del tenis, Marat Safin se trasladó a España a los 14 años para perfeccionar su juego. Allí entrenó bajo la tutela de Rafael Mensua, quien desempeñó un papel clave en su desarrollo como jugador. Safin expresó en varias ocasiones su gratitud hacia España, afirmando que todo lo que logró en su carrera se lo debía al país y a su primer entrenador. Tras varios años viviendo en territorio español, en 2002 decidió mudarse a Ginebra, Suiza, aunque siempre mantuvo un vínculo especial con España.
Safin inició su carrera profesional en 1997, cuando aún no había cumplido los 18 años, y tres años después logró coronarse como el mejor jugador del mundo tras vencer al legendario Pete Sampras en la final del US Open. Durante nueve semanas, Safin lideró el ranking masculino, consolidándose como uno de los jugadores más destacados de su generación.
Sin embargo, su carrera no estuvo exenta de dificultades y controversias, dado que era conocido por sus enfados dentro de las pistas, lo que lo llevó a protagonizar numerosos episodios de frustración durante los partidos. Tal era la situación que en una ocasión el propio Safin llegó a confesar que había roto más de mil raquetas a lo largo de su carrera. A pesar de estos altibajos, su talento y carisma lo convirtieron en uno de los favoritos del público.
Su retirada del tenis y su salto a la política rusa
Tras retirarse del tenis profesional, Marat Safin decidió incursionar en la política. El extenista se convirtió en diputado en Rusia, un giro inesperado en su trayectoria que lo llevó a involucrarse en los asuntos públicos de su país. En el año 2011 fue elegido diputado del Parlamento ruso por el partido oficialista Rusia Unida. En 2016, fue reelegido, pero un año después decidió abandonar el cargo. Aunque su carrera política no ha sido tan mediática como su etapa deportiva, Safin ha seguido siendo una figura de interés, especialmente por sus declaraciones controvertidas.
En los últimos años, Marat Safin ha generado titulares por sus comentarios relacionados con teorías de conspiración. Estas declaraciones han suscitado tanto críticas como curiosidad, reflejando una faceta distinta del extenista que pocos conocían. Aunque no se detallan las teorías específicas que ha mencionado, su postura ha añadido un nuevo capítulo a su ya multifacética trayectoria.
