Ángel, el padre de Jorge Vilda: preparador físico del Barça de Johan Cruyff y entrenador de la selección femenina sub-19

El extécnico de la selección femenina de fútbol Jorge Vilda ha acudido este miércoles a la Audiencia Nacional para declarar en el juicio contra Luis Rubiales por el beso no consentido a Jenni Hermoso. Fue con Vilda al frente del banquillo, cuando las jugadoras conquistaron el Mundial de Australia 2023, el torneo en el que comenzó todo un terremoto dentro de las filas del equipo español. Un cargo al que llegó siguiendo los pasos de su padre, Ángel, quien también cuenta con una larga carrera dentro del deporte rey.

Vilda creció rodeado del ambiente del fútbol profesional. Un hecho que le debe en gran medida a su padre, una figura clave en los banquillos de importantes equipos españoles y en la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). La trayectoria de Ángel está llena de hitos que marcaron su carrera como preparador físico, desempeñándose en épocas doradas de clubes como el FC Barcelona, el Atlético de Madrid y el Real Madrid.

Ángel Vilda fue el encargado de la preparación física del mítico Dream Team del Barça de Johan Cruyff, un equipo que marcó una era en la década de los 90. Bajo la dirección del técnico neerlandés, este conjunto conquistó cuatro Ligas consecutivas y alcanzó la gloria europea al ganar la Copa de Europa en 1992. Vilda, con su experiencia y conocimientos en entrenamiento físico, desempeñó un papel fundamental en mantener a los jugadores en su máximo rendimiento durante una de las etapas más exitosas en la historia del club catalán.

Tras su paso por el Barcelona, Ángel continuó su carrera en otros equipos de prestigio. Fue parte del Atlético de Madrid durante el mandato de Luis Aragonés, un técnico emblemático en la historia del club rojiblanco. Durante su etapa en el Atlético, la labor de Vilda como preparador físico se aunó al estilo intenso y combativo que siempre caracterizó a los equipos de Aragonés.

Con el Real Madrid, Ángel formó parte de otro período significativo, esta vez bajo la dirección del alemán Jupp Heynckes, entrenador conocido por liderar al equipo blanco hacia la conquista de la Liga de Campeones en 1998. Además, también tuvo una etapa con el Athletic Club, donde nuevamente trabajó bajo las órdenes de Heynckes, consolidando su reputación como un profesional de alto nivel en el ámbito del entrenamiento físico.

La segunda parte de la carrera de Ángel Vilda se desarrolló en la Real Federación Española de Fútbol, donde pasó a desempeñar funciones con los equipos nacionales femeninos. Fue preparador físico de la selección femenina sub-19, contribuyendo al desarrollo del fútbol femenino en un momento en el que el deporte comenzaba a ganar mayor relevancia en España.

Fue en esta etapa cuando su hijo, Jorge Vilda, decidió seguir sus pasos. Jorge comenzó su camino en el fútbol como entrenador del Canillas, un modesto club madrileño, pero poco después dio el salto a la Ciudad del Fútbol de Las Rozas, donde trabajó como asistente de su padre en la selección sub-19 femenina. La estrecha relación entre ambos facilitó el aprendizaje y el crecimiento de Jorge, quien destacó por su capacidad de liderazgo y conocimientos técnicos.

Posteriormente, Jorge asumió la dirección del combinado sub-17, marcando el inicio de una trayectoria que lo llevaría a convertirse en seleccionador del equipo absoluto femenino. Bajo su mando, España alcanzó el máximo logro en su historia al ganar el Mundial Femenino de 2023.