Los más de 20 años de Florentino Pérez como presidente del Real Madrid: del fracaso de los “galácticos” a los audios contra Casillas y Raúl o la Superliga

Nueva fumata blanca para Florentino Pérez. El presidente del Real Madrid se mantendrá en el trono blanco hasta el año 2029, después de ser reelegido, una vez más, sin oposición, al igual que ocurriera en las últimas elecciones celebradas en 2021. La primera vez que Florentino asumió el liderazgo del club blanco fue en el año 2000, desde entonces siempre ha ocupado el asiento presidencial de Real Madrid, a excepción de tres años en los que decidió mantenerse alejado el club. Un largo periodo de tiempo marcado por los éxitos deportivos y algunos fracasos, además de las polémicas que, en ocasiones, han situado al presidente blanco en el foco mediático.

El 16 de julio del año 2000, Florentino aterrizó en el Real Madrid. Entró por las puertas de Chamartín y puso el club patas arriba. Durante su campaña electoral, el entonces candidato a la presidencia situó a Figo (que entonces jugaba en el FC Barcelona) como su gran apuesta para ganar en las urnas. Semanas después, el jugador portugués era presentado en el templo blanco. La primera gran estrella estaba ya en el Santiago Bernabéu. Después llegarían también Zidane, Ronaldo, Beckham u Owen. Unos movimientos que permitieron al equipo ganar dos Ligas y una Champions. A pesar de los éxitos, decidió cesar a Vicente del Bosque como entrenador y el Real Madrid entró en una espiral de fracasos que provocaron la dimisión del presidente.

Florentino ponía fin a su mandato el 27 de febrero de 2006. “Quizá yo he maleducado a los jugadores y lo que quiero ahora es decirles que lo único importante es el Real Madrid”. El modelo del Real Madrid de los galácticos había fracasado y el entonces presidente asumió las consecuencias. Pero tan solo tres años más tarde (en 2009) estaba de vuelta para ponerse al frente del club blanco después de la dimisión de Ramón Calderón por las irregularidades en una Asamblea de Compromisarios. Una vez más, Florentino quería que su regreso resonara, no solo por los cuatro costados del estadio de Chamartín, sino en todo el mundo.

El modus operandi fue el mismo: fichar estrellas mundiales. A la plantilla blanca se sumaron Cristiano Ronaldo, Kaká, Benzema, Bale, Xabi Alonso, James, Hazard y, el más reciente, Kylian Mbappé. Los títulos no se hicieron esperar: cinco Ligas, tres Copas del Rey, cinco Supercopas de España, seis Champions y seis Mundiales de Clubes. Todo un palmarés para el presidente blanco. El presidente blanco quería más y en medio de ese periodo de éxitos, decidió que era el momento de unir sus fuerzas a la de otros clubes y que una nueva competición viera la luz: la Superliga.

En enero de 2021, The Times publicó un extenso dossier donde se detallaba el proyecto de la Superliga. Doce grandes equipos europeos (Real Madrid, Barcelona, Atlético, Milan, Arsenal, Chelsea, Inter, Juve, Liverpool, Manchester City, Manchester United y Tottenham) se habían unido para promover esta nueva competición con Florentino como primer presidente del torneo. A partir de ese momento, FIFA comenzó a cargar contra el nuevo proyecto y a tomar medida para evitar que se llevara a cabo. El organismo liderado por Gianni Infantino advirtió que “a todo club o jugador implicado en una competición así, como consecuencia, no se le permitiría participar en ninguna competición organizada por la FIFA ni por su confederación correspondiente”.

Muchos de los clubes fundadores decidieron entonces bajarse del proyecto de la Superliga, quedando únicamente el Real Madrid, FC Barcelona y Juventus. Tras observar todos los marcos legales de esa nueva competición y ser conscientes de la pérdida de apoyos entre los principales clubes del continente, la nueva competición se fue aparcando. Las represalias, según Florentino, llegarían ese mismo verano.

El 13 de julio de 2021 se produjo la caída a los infiernos de Florentino Pérez. El Confidencial publicó audios que datan de 2006 y en los que se reconoce al presidente del Real Madrid hablando sobre diversos temas del club y de jugadores concretos. “Casillas no es portero para el Real Madrid, no lo ha sido nunca. Ha sido el gran fallo que hemos tenido, lo que pasa es que tienes a los que le adoran, le quieren, hablan con él y le defienden tanto. Es una de las grandes estafas. La segunda es Raúl. Las dos grandes estafas del Real Madrid son primero Raúl y segundo Casillas”, aseguró Florentino en septiembre de 2006.

“Raúl es malo, que se cree que el Madrid es suyo y utiliza todo lo que ha desarrollado para su propio beneficio, él y su representante. El culpable de que el Madrid vaya mal…”, continuaba. Respecto al entonces guardameta, añadía. “Casillas no tiene dos dedos de frente. Yo le conozco perfectamente. Es un tío muy corto. Cuando se lleva mejor o peor con su novia se le nota, está ausente. Es como un niño pequeño. Es un perrito faldero, como un monigote, una cosa infantil”.

Después de que estás reproducciones salieran a la luz, Florentino se vio obligado a romper su silencio admitiendo la veracidad de la información publicada a través de un comunicado difundido por el Real Madrid. “Las frases reproducidas se pronuncian en conversaciones grabadas clandestinamente por D. José Antonio Abellán, quien lleva muchos años intentando venderlas sin éxito. Sorprende ahora que, a pesar del tiempo transcurrido, las recoja hoy el diario El Confidencial”, comenzaba el escrito.

El presidente blanco consideró que la publicación de estos audios se debían a la Superliga: “Son frases sueltas de conversaciones sacadas del amplio contexto en el que se producen. Que se reproduzcan ahora, tras haber transcurrido tantos años desde que tuvieron lugar esas conversaciones, entiendo que obedece a mi participación como uno de los promotores de la Superliga”.

Ahora, Florentino, que acaba de ser reelegido, afronta nuevos desafíos de cara a los próximos años. En su lista de tareas aún se mantiene pendiente la Superliga, así como la suma de más títulos que permitan seguir ampliando el palmarés del club. Aunque su gran objetivo será seguir rentabilizando la entidad y la nueva reforma del estadio tiene mucho que ver en este cometido.