Qué es verdad y qué no en ‘Cónclave’, la película que ha aumentado casi un 700% su recaudación tras la muerte del papa Francisco

El proceso para elegir a un nuevo sumo pontífice ha despertado la curiosidad de miles de espectadores en España

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La muerte del papa Francisco ha dejado un profundo vacío en el seno de la iglesia Católica. Creyentes de todo el mundo han querido despedir a un hombre que cambió el rumbo del cristianismo al iniciar una apertura muy alejada de los conservadores dogmas que hasta ahora habían imperado en el Vaticano. Sin embargo, ahora se debe elegir a un nuevo representante del catolicismo para que continúe (o desande) los pasos que inició su predecesor, en un cónclave para elegir a un nuevo papa que dará inicio el próximo 7 de mayo.

Es por este trámite que mucha gente ha querido aprovechar el estreno en 2024 de una película que explica cómo se elige al nuevo sumo pontífice, titulada precisamente como el proceso requerido. Así, Cónclave recrea, al ritmo de los mejores thrillers, el encuentro entre los diferentes cardenales para elegir a un nuevo papa. Una producción en la que sus inmejorables interpretaciones, su esmerada fotografía y su genial banda sonora la llevaron a optar nada más y nada menos que a ocho premios Oscar.

Sin embargo, la creciente celebridad de la película (que ha aumentado su recaudación en un 699% el primer fin de semana tras la muerte del papa) ha hecho que muchos espectadores se pregunten hasta qué punto es verídico lo que en ella se muestra.

Lo cierto es que tanto en el largometraje como en el libro que este adapta existe un afán de realismo que hace muy creíbles los hechos que se cuentan. Un ejemplo es la secuencia inicial, en la que se muestra qué ocurre desde la muerte del santo padre hasta la declaración de la Sede Vacante, para que posteriormente el camarlengo y el decano organicen el próximo cónclave.

El cardenal italiano Giacomo Biffi,
El cardenal italiano Giacomo Biffi, en el centro, presta juramento al inicio del cónclave para elegir al próximo papa en la Capilla Sixtina del Vaticano, el lunes 18 de abril de 2005. (AP Foto/Osservatore Romano via AP, Archivo)

Todo lleva su tiempo

En efecto, todo el proceso mostrado en la película ocurre en la realidad. Después de que todos los cardenales menores de 80 años lleguen a la Santa Sede y se celebre una misa Pro Eligendo Pontífice, todos los candidatos y el personal responsable de su cuidado se encierran (sin conexión a Internet, de la que sí goza una monja de Cónclave) para que se den inicio las votaciones en la Capilla Sixtina. Allí, se vota una vez el primer día y si no se llega a la mayoría suficiente -esto no aparece tal cual en la película- otras cuatro durante cada jornada durante otros tres. Después se puede permitir un día de oración y reflexión antes de retomar el proceso.

En la película, sin embargo, no se le da importancia al proceso que está ocurriendo precisamente ahora: los Novendiales, el rito funerario que consiste en nueve días consecutivos con misas especiales (Misae Novendialium) para encomendar el alma del papa y preparar a la Iglesia para su siguiente etapa. Este tiempo permite, entre otras cuestiones, que los cardenales puedan llegar al Vaticano antes del inicio del cónclave.

Podrían ser excomulgados si se posicionan

En lo que la película sí acierta es en el secretismo del voto y en la prohibición de mostrar una clara postura en favor de alguno de los candidatos (se arriesgan, si lo hacen, a la excomunión). Sin embargo, esta es precisamente la razón por la que los complots y diferentes estrategias -incluso ilegales- para determinar el resultado de la elección carecen de fundamento.

El actor Carlos Diehz en
El actor Carlos Diehz en 'Cónclave'. (Focus Features)

No hay constancia de que se produzcan este tipo de intrigas, y en cualquier caso el carácter favorito de algunos cardenales es debido a las actividades anteriormente realizadas y su postura respecto a las políticas promovidas por el papa anterior. Las declaraciones personales, los sermones y los debates son cuestiones que, durante el cónclave, están absolutamente prohibidas.

Por eso mismo, tampoco es posible que de la noche a la mañana aparezca un nuevo candidato desconocido por todos, como ocurre en la película, ya que existen diferentes mecanismos para investigar y validar a los diferentes candidatos que se postulen para sustituir al papa.