
Noticia actualizada - Hablan los okupas de la vivienda: “No sabíamos el valor de esta casa”
Los últimos años de vida del famoso poeta Antonio Machado estuvieron marcados por el inicio de la Guerra Civil en 1936. Ese año, el escritor y su familia se instalaron en un chalet de la localidad de Rocafort conocido como Villa Amparo.
En este chalé, de casi 430 metros cuadrados y en una parcela de más de 3.300 metros cuadrados, los Machado residirían durante dos años. Allí se escribieron tan poemas tan famosos como la denuncia El crimen fue en Granada, una elegía a Federico García Lorca, o El poeta y el Pueblo, un discurso que se leería en Valencia junto a los miembros de la Alianza de Intelectuales Antifascistas. Villa Amparo se convirtió así en un lugar histórico que ahora, sin embargo, ha sido ‘okupado’ por al menos tres personas.
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Tres personas en el interior de la villa
Este martes, la Consellería de Cultura de la Generalitat ha realizado un requerimiento para conminar a los “ocupantes ilegales” a abandonar “voluntariamente” la famosa propiedad. La Policía Local de Rocafort se ha trasladado hasta el chalé y ha señalado que, si no abandonan la casa, se llevarán a cabo “medidas judiciales urgentes”.
La noticia ha sido adelantada por Levante-EMV, medio que ha informado de que al menos tres personas, dos hombres y una mujer, lograron entrar este fin de semana en la vivienda. No solo eso, sino que los intentos de ‘okupación’ llevaban produciéndose desde hace varios meses.
Tras darse cuenta de que alguien había entrado en la vivienda, varios agentes de la localidad se acercaron e identificaron a los okupas, que aún ahora continúan en el interior de la casa.
Una inversión millonaria
Cabe recordar que Villa Amparo, declarada Bien de Relevancia Local y parte del Inventario General del Patrimonio Cultural Valenciano, es un inmueble público, puesto que la Generalitat la compró en 2018 a cambio de un pago de 1,4 mllones de euros. Antes, el edificio había servido como restaurante y hasta como local para bodas y banquetes.
Su valor cultural hizo, no obstante, que la administración decidiera adquirirla y, cinco años más tardes, contratar servicios para la redacción de un proyecto de rehabilitación que se espera que concluya su licitación después de verano de este año.
En este proyecto de restauración, la Generalitat espera acometer un trabajo que preste “especial atención a elementos funcionales distintivos como la escalera imperial o la torre de Miramar, así como a materiales originales como las carpinterías de maderas nobles o los pavimentos de cerámica Nolla”. Además, se buscará ofrecer un inmueble que sea el reflejo de un “lugar de inspiración para escritores y lectores”.