
Dicen que, cuando uno gana el Oscar, las ofertas de trabajo vienen solas. Es verdad que no ha sido así para absolutamente todos los actores y actrices, pero también lo es que para muchos alzarse con la estatuilla es un vehículo de promoción de incalculable valor. En el caso de todo un veterano como Adrien Brody, el Oscar no ha sido la razón inmediata, pero sí el detonante para elegir su nueva película tras alzarse con el premio a Mejor actor en la reciente gala. Y no estamos hablando de una película cualquiera, sino de uno de los proyectos más esperados.
Se trata de la nueva película de Damien Chazelle, el director detrás de títulos como La La Land: la ciudad de las estrellas o Whiplash, y quien llevaba apartado de la dirección desde el fracaso de Babylon, su última película. Aunque se rumoreaba con la posibilidad de que Chazelle había entrado en una especie de lista negra tras el batacazo que se llevó su ambicioso proyecto junto a Margot Robbie y Brad Pitt, lo cierto es que parece haber vuelto al ruedo de la mejor manera posible, con una nueva gran historia y flanqueado más que posiblemente por dos de los mejores actores del planeta.
Porque, de confirmarse la incorporación de Brody, la película contaría con varios Oscar entre las figuras de su director, del actor y del otro intérprete, nada menos que Leonardo DiCaprio. El actor de El Lobo de Wall Street era hasta el momento el líder del proyecto, aunque aun no está oficialmente confirmada su presencia. Brody tiene varios proyectos sobre la mesa tras haberse unido al selecto club de los dos veces ganadores del Oscar, junto a leyendas como Marlon Brando, Gary Cooper, Spencer Tracy, Dustin Hoffman o Tom Hanks. De seguir adelante con el proyecto, puede que este fuese un trabajo que le diese acceso a una tercera estatuilla, lo que le podría llevar a igualar al mismísimo Daniel Day-Lewis.

Una curiosa historia real
La película estaría inspirada en la figura de Evel Knievel, un motorista de acrobacias que se dio a conocer en los años 60 y 70 por la peligrosidad de sus números, llegando a realizar saltos hasta entonces imposibles. Entre sus hazañas se incluyen saltar un tanque lleno de tiburones, saltar 46 metros de las fuentes del Caesar Palace de Las Vegas, ser tirado a 300 kilómetros por hora por automóviles manteniéndose con un paracaídas o su gran reto, el cañón Snake River en Idaho. La carrera de Knievel también estuvo llena de accidentes y graves lesiones, hasta su retirada del espectáculo y su muerte a causa de su delicada condición, su diabetes y una fibrosis pulmonar.
Evel Knievel on Tour es una película de la que DiCaprio y Chazelle llevan preparando desde hace tiempo, después de que el director se acercara inicialmente al actor. Esa discusión llevó a DiCaprio a sugerir una película de Evel Knievel que había estado intentando sacar adelante en los últimos meses. Después de que Chazelle trabajara en el borrador, DiCaprio empezó a mostrar interés en protagonizarla. Habrá que ver cómo se desarrollan los acontecimientos y si finalmente DiCaprio y Adrien Brody forman equipo, en lo que podría ser una dupla inédita de lo más exitosa.