Los caminos de James Bond y Christopher Nolan han sido prácticamente paralelos desde que el británico comenzó a dedicarse a esto del cine. Mientras uno se destapaba primero con Batman Begins y luego con El truco final, la franquicia daba un salto cualitativo con Daniel Craig ocupando el rol en 2005. Veinte años después, ahora sabemos que esos caminos han estado a punto de cruzarse, pero que una vez más se han tenido que mantener paralelos. Aunque ahora también sabemos el porqué.
La saga cinematográfica en torno al espía más famoso de la historia está sufriendo una etapa de cambios. Tras cerrar el capítulo de Daniel Craig como 007 en Sin tiempo para morir, los productores de la franquicia andaban a la caza de un nuevo James Bond, pero también de un nuevo director. Lo que se han acabado encontrando, por otro lado, es que los derechos de la saga han ido a parar a Amazon, lo cual ha cambiado mucho las cosas. Amazon ya había adquirido la productora MGM en 2022 por 8.500 millones de dólares adueñándose así de la marca James Bond, pero en las últimas semanas se había anunciado también que los productores de la saga, Barbara Broccoli y Michael G. Wilson -ambos hijos de Albert Broccoli, productor original de la saga- habían cedido por completo el control creativo a la compañía de Jezz Bezos.
“Es frustrante si eres dueño de un Ferrari pero no controlas dónde va. Los Broccoli han dado el mejor ejemplo en la historia de Hollywood de gestión de un personaje. Pero en el complejo panorama actual, tiene sentido que Amazon se ponga al volante y controle su propio destino”, explicaba el antiguo jefe de Amazon, Roy Price. Esto da carta blanca a la compañía para hacer lo que quiera con la saga, ya sea dar luz verde a una serie sobre los orígenes del personaje, hacer un casting por redes sociales -ha pasado- o encargarle la película a un gran director de Hollywood.
Esto último será dejando fuera de la ocasión a Nolan, ya que es precisamente la falta de libertad creativa lo que le impidió hacerse cargo de una adaptación en 2017, cuando el británico estrenó Tenet y se interesó por la saga de 007. Fue en ese momento cuando le llegó la información de que, estando Barbara Broccoli al frente, ningún director tendría la última palabra en la película y su versión final, algo que espantó por completo al director de Origen. Por el contrario, Nolan se embarcó en otra aventura en la que tampoco le iría mal, Oppenheimer, por la que ganó el Oscar a Mejor director y a Mejor película el año pasado.
De Bond a Ulises
Los caminos de Bond y Nolan siguen transitando por la vía de siempre, y de momento no tiene pinta de que se vayan a cruzar. El británico se encuentra actualmente inmerso en el rodaje de su próxima película, La Odisea, en la que contará el regreso de Ulises de Troya a Ítaca, y donde estará acompañado de Matt Damon, Tom Holland, Anne Hathaway, Charlize Theron o Robert Pattinson, entre otros. Pattinson precisamente ha sido uno de los que ha sonado para hacer el papel de Bond en los últimos años, aunque desde que encarnase a Batman ha estado bastante ocupado.
Ahora mismo tiene pinta de que Amazon tiene en el punto de mira otros actores para el papel, pero también tendrá que encontrar un cineasta que le de sentido a la saga, ya sea como showrunner en una serie o como director al frente de una nueva etapa en la saga. Pero si es verdad que ahora Amazon tiene el control creativo total, y Nolan termina su peripecia homérica, no hay que descartar que en un futuro esos caminos se vuelvan a cruzar y se unan de una vez por todas.
