La gran aventura de Gene Hackman en España: sufrió un accidente montando a caballo y acabó envuelto en una guerra de producciones

El actor se desplazó en los 70 al desierto de Tabernas para filmar ‘Marchar o Morir’ junto a Terence Hill y otras estrellas internacionales como Max von Sydow o Catherine Deneuve

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Gene Hackman en 'Marchar o
Gene Hackman en 'Marchar o Morir', la película rodada en Almería

A lo largo de sus más de sesenta años de carrera, Gene Hackman demostró ser un actor capaz de afrontar cualquier adversidad. Fue uno de los rostros más reconocibles del llamado Nuevo Hollywood gracias a películas tan icónicas como The French Connection (Contra el imperio de la droga) de William Friedkin, La conversación de Francis Ford Coppola o La noche se mueve de Arthur Penn, quien en gran medida había dado el pistoletazo de salida a esa nueva época con Bonnie y Clyde. Aunque su popularidad explotó a finales de la década dando vida al villano de Superman (Richard Donner, 1978), lo cierto es que un poco antes el actor se había dejado caer por España, y no por un sitio cualquiera.

El actor, que acaba de fallecer a los 95 años, visitó el desierto de Tabernas, en Almería, allá por 1976, para el rodaje de una película cuyo rodaje hubiera dado para otro filme en sí mismo. Se trataba de Marchar o morir, un largometraje bélico en el que sería acompañado por estrellas internacionales y populares de la época, como el italiano Terence Hill, la francesa Caherine Deneuve y el sueco Max Von Sydow. Aunque Tabernas, considerado como la mini Hollywood española por la cantidad de películas que se rodaron allí, acostumbraba a albergar westerns, en el caso de Hackman pudo ser testigo de otra historia bien distinta.

Marchar o morir se centra en el mayor Foster (Hackman), un militar que, tras finalizar la I Guerra Mundial, le es encomendada la tarea de liderar un ejército en Marruecos. Foster, que aun arrastra secuelas del gran conflicto bélico y que ha empezado a tener problemas de alcoholismo, se encuentra con un destacamento formado por convictos que no parecen muy dispuestos a hacerles caso, así como con un equipo de arqueólogos a los que debe escoltar mientras realizan excavaciones en territorio sagrado. Pero no es lo único con lo que se encuentra.

El inhóspito desierto marroquí (que era en realidad el almeriense) recibe a Foster con el “Gitano” Marco Segrain (Terence Hill), un encantador ladrón de joyas famoso por una racha delictiva de tres años en la Riviera antes de ser arrestado. También al recluta ruso Iván (Jack O’Halloran), un gigantesco antiguo miembro de la guardaespaldas de élite de la familia imperial rusa, el enclenque pero musical François ‘Sombrero de copa’ Gilbert (André Penvern), y Frederick Hastings (Paul Sherman), un romántico aristócrata inglés que añora los días de la Gran Guerra. Foster al principio choca con su indisciplina y estos con sus métodos, pero eventualmente acaban uniendo fuerzas cuando se presenta un enemigo común, el líder marroquí Abd el-Krim (Ian Holm), quien busca expulsar a las tropas de su territorio.

Gene Hackman en 'Marchar o
Gene Hackman en 'Marchar o morir'

Una lesión que salió cara

Si la película está llena de acción, sangre y arena, tras las cámaras la producción no estuvo exenta de problemas. El principal de ellos, la lesión que sufrió el propio Hackman durante una de sus secuencias, al caerse de un caballo y hacerse daño en la espalda. La grave lesión del actor, que por aquel entonces contaba con 46 años, obligó a la producción a detenerse por completo, e inició un gran conflicto, ya que las aseguradoras del rodaje no permitían continuar en esas condiciones. En su lugar, se propuso terminar la película en el desierto de Nevada, aunque para ello tuvieron que transportar arena desde Agadir, en Marruecos, haciendo que los costes de producción aumentasen en gran medida.

La lesión de Hackman no fue el único incidente señalado en el rodaje, ya que hubo otro que también complicó en gran medida Marchar o morir. Aunque la película estaba usando decorados de otro título de unos años atrás, el western de 1970 El Condor -que también servirían años después para Conan, el bárbaro-, la filmación del filme coincidió con la de otro, Mi bello legionario (The Last Remake of Beau Geste), una parodia de las películas de aventuras en el desierto cuyo rodaje chocó con el del filme de Hackman. Se dice que, como el espacio y los suministros eran reducidos, ambas producciones se peleaban por el uso de caballos, camellos, vestidos y demás extras, e incluso que llegó un punto en que los figurantes aparecían en la película equivocada.

Encuentran muertos al actor Gene Hackman, su esposa y su perro en Santa Fe.

Sea como fuere, Marchar o morir ha quedado en el recuerdo como una gran película bélica. Si bien no es el título más icónico de Hackman, y es lo normal dada su filmografía, resulta una divertida anécdota de su paso por España. Y su personaje, como tantos otros a los que dio vida y le labraron fama de gruñón y actor complicado de trabajar, dejó también citas míticas: “Si la Legión no te atrapa, lo hará el desierto. Si el desierto no lo hace, los árabes lo harán. Y si los árabes no lo hacen, entonces yo lo haré. No sé qué es peor”. Descanse en paz una leyenda del cine.