La hija de Michu se instala en Madrid: la nueva vida con su abuelo, la ‘ausencia’ diaria de José Fernando y la inminente separación de su tía Gloria Camila

Casi dos meses después de haber dado el último adiós a María Rodríguez Gamaza, conocida como Michu, se ha resuelto una de las grandes incógnitas que dejó tras su partida. Y es que se desconocía qué pasaría con el futuro de Rocío, su hija con José Fernando Ortega. Hace una semana, se realizó la apertura del testamento de la gaditana, lo que provocó que la familia tomase firmes decisiones sobre la pequeña.

La primera medida que se ha tomado sobre el futuro de la primogénita del hijo de Rocío Jurado ha sido la inscripción de la pequeña en un colegio de Madrid. La niña se ha instalado en la capital española junto a su abuelo, Ortega Cano, y su tía, Gloria Camila. La menor mantiene un vínculo muy cercano con su tía, con quien tiene una estrecha relación que se ha fortalecido aún más tras la muerte de su madre.

De esta manera, la niña dejará atrás su vida en Arcos de la Frontera, donde reside su familia materna, para empezar una nueva etapa en Madrid. Pese a que es cierto que estará junto a Gloria Camila, lo cierto es que solo estará a su lado durante un tiempo. Y es que la hija de Rocío Jurado es concursante de Supervivientes All Stars 2025, por lo que su separación es inevitable.

La noticia de que Rocío se va a Madrid ha llenado de alegría a la influencer, quien ha compartido en sus redes sociales las primeras imágenes junto a la niña. En la fotografía, la creadora de contenido aparece dándole la mano a su sobrina. Aunque la fotografía no iba acompañada de ningún texto, lo cierto es que ha dejado claro que se siente sumamente ilusionada con su sobrina.

Además de la ausencia inminente de su tía, la pequeña María del Rocío, su nombre completó, tampoco estará todo el tiempo junto a su padre, pues este se encuentra internado en el Hospital de Salud Mental Rodríguez Lafora desde hace un año y medio. Y, anteriormente, estuvo más de siete años interno en el Centro San Juan de Dios de Ciempozuelos. En ambos centros ha estado centrado en mejorar sus trastornos de conducta y adicciones.

Aunque espera recibir el alta hospitalaria a lo largo de este año, lo cierto es que, actualmente, José Fernando está incapacitado debido a un trastorno de la personalidad diagnosticado desde su infancia. Razón por la que la custodia de Rocío recayó exclusivamente en el juez. Además, está permanentemente en el centro psiquiátrico y, según su evolución, obtiene distintos permisos de fin de semana y vacaciones.

De esta manera, la pequeña Rocío vivirá junto a su abuelo, Ortega Cano, la mayor parte del tiempo. El fallecimiento de Michu, ocurrido el 8 de julio a los 33 años, desencadenó un enfrentamiento entre ambas familias por la custodia de Rocío. Tanto Inma, abuela materna, como Ortega Cano expresaron su voluntad de asumir la responsabilidad del cuidado de la menor.

Las disposiciones recogidas en el testamento de Michu han resuelto la situación por el momento, dejando estipulado tanto el reparto de la herencia como la tutela de Rocío. Los últimos deseos de la madre han sido determinantes para la decisión. Por ahora, no ha resultado necesario que los abogados intervengan en una disputa legal, aunque la familia permanece atenta a las próximas etapas del proceso.

El traslado de la menor a la capital, bajo la supervisión de su abuelo y su tía, cumple con las directrices establecidas en el testamento y permite un entorno de estabilidad para la niña. Una decisión que ha provocado un profundo dolor en la madre de Michu, Inmaculada Gamaza, quien está muy unida a la pequeña.