María Cristina Clemente, notaria: antes de firmar una hipoteca este es “un paso obligatorio que protege tus derechos”

Antes de asumir un compromiso financiero de largo plazo, la normativa establece un trámite para reforzar la seguridad del consumidor

Guardar
María Cristina Clemente, notaria, habla
María Cristina Clemente, notaria, habla sobre el acta de transparencia notarial. (@notariabuendia/TikTok)

Antes de firmar una hipoteca, cualquier ciudadano en España debe pasar por un trámite obligatorio: el acta de transparencia notarial. La notaria María Cristina Clemente Buendía lo describe como una garantía para el consumidor. Según explica en su cuenta @notariabuendia, se trata de un proceso que asegura que la persona que va a endeudarse durante años entiende con claridad las condiciones del préstamo que firmará con el banco.

El objetivo es que no haya sorpresas después. En esta fase, el cliente recibe la documentación, puede leerla con calma y tiene derecho a preguntar todas las dudas que surjan. El notario no solo valida el proceso, también actúa como figura independiente que vela por la protección de derechos.

Qué es el acta de transparencia notarial

El acta de transparencia notarial consiste en una comparecencia ante notario que se realiza días antes de la firma de la hipoteca. Allí, el cliente revisa la información facilitada por el banco y comprueba que las condiciones se ajustan a lo que se ha pactado. El notario explica los puntos más relevantes y comprueba que el consumidor entiende lo que va a firmar.

Notaria Buendía señala que en este paso el ciudadano puede formular preguntas sin prisas ni presiones. Se trata de resolver posibles dudas sobre conceptos como el tipo de interés, las comisiones, las cláusulas de vencimiento o las consecuencias de un impago. El notario responde con un lenguaje sencillo y cercano, alejándose del tecnicismo que muchas veces dificulta la comprensión de los contratos financieros.

La importancia del acta previa radica en que otorga transparencia a un acuerdo que, por su complejidad, puede generar inseguridad. Gracias a este trámite, el consumidor no llega al momento de la firma con incertidumbres.

Las hipotecas a tipo fijo ya representan el 36% del saldo hipotecario de los bancos españoles.

La documentación que entrega el banco

Para que la comparecencia ante notario se produzca, el banco tiene la obligación de entregar al cliente un conjunto de documentos con antelación. Entre ellos están la ficha europea de información normalizada, el proyecto de contrato de préstamo hipotecario y un desglose claro de los gastos. Estos papeles sirven de base para que el notario pueda explicar cada cláusula y confirmar que todo se ajusta a la normativa vigente.

Este procedimiento se aplica a todos los ciudadanos que vayan a firmar una hipoteca, sin excepciones. Como resalta María Cristina Clemente en Notaria Buendía, la finalidad es dar seguridad a las dos partes: tanto al consumidor, que obtiene certeza de lo que va a firmar, como a la entidad bancaria, que garantiza que el proceso se ha realizado con transparencia y conforme a la ley.

Cómo evita problemas futuros

El acta previa no solo protege en el momento de la firma, también puede ahorrar disgustos en el futuro. Si surgen conflictos entre cliente y banco, queda constancia de que el notario explicó de forma detallada las condiciones y de que el consumidor comprendió cada cláusula.

De esta manera, se reducen los riesgos de reclamaciones y demandas posteriores por falta de información o por cláusulas abusivas. Además, el ciudadano tiene la tranquilidad de haber tomado una decisión informada sobre una deuda que puede acompañarlo durante gran parte de su vida.

Buendía insiste en que este paso no es un simple trámite burocrático, sino una herramienta de educación financiera y protección de derechos. El acta de transparencia permite a las personas firmar su hipoteca con conocimiento y confianza, en lugar de con dudas o miedos.