Ter Stegen se niega a firmar su informe médico y el Barça le abre un expediente disciplinario

El conflicto entre el club y su capitán se agrava en pleno mercado de fichajes, con la inscripción de Joan García y Marcus Rashford en juego

Guardar
 El portero del Barcelona
El portero del Barcelona Marc-Andre ter Stegen (AP Foto/Manu Fernández)

Marc-André ter Stegen, portero y capitán del FC Barcelona, ha entrado en conflicto abierto con el club tras negarse a firmar el informe médico que evalúa su lesión de espalda. Esta negativa, insólita en el ámbito profesional, ha llevado al Barça a abrirle un expediente disciplinario por “falta de colaboración”, en medio de un contexto tenso por las dificultades económicas que atraviesa la entidad para inscribir a sus nuevos fichajes.

El caso ha estallado apenas unos días después de que el guardameta alemán pasara por el quirófano para ser intervenido de una dolencia en la espalda que arrastraba desde la pasada temporada. Pese a que la intervención era conocida y programada, la ausencia de Ter Stegen se ha convertido en una pieza clave en la estrategia del club para sortear las limitaciones del “fair play” financiero de LaLiga.

Un verano lleno de tensión y un fichaje en el centro del conflicto

La llegada del joven portero Joan García, procedente del Espanyol, ha sido una de las grandes apuestas del club para reforzar la portería. Sin embargo, su inscripción depende de liberar masa salarial, y la baja médica de Ter Stegen se considera fundamental para cumplir con los requisitos económicos que impone LaLiga.

En este escenario, el club esperaba que Ter Stegen firmara el informe médico que certifica oficialmente su baja de larga duración, lo que permitiría registrar a García utilizando la llamada “licencia por lesión de larga duración”. Pero el portero alemán ha rechazado hacerlo, generando un inesperado bloqueo.

Según informan medios catalanes, Ter Stegen considera que el informe podría perjudicarle a nivel contractual y teme que el club esté buscando forzar su salida a medio plazo, aprovechando su actual situación física. En este sentido, se siente señalado por la dirección deportiva, que desde hace meses busca fórmulas para aligerar la plantilla y reducir el coste salarial de los veteranos.

Comunicado de Ter Stegen después
Comunicado de Ter Stegen después de su operación (Instagram)

El expediente y las posibles consecuencias

Ante la negativa del jugador, el club ha optado por abrirle un expediente disciplinario, una medida poco habitual pero que busca dejar constancia oficial del desacuerdo. Fuentes del entorno azulgrana citadas por El País aseguran que Ter Stegen se ha mostrado inflexible y no ha querido colaborar con los servicios médicos del club, algo que se considera una falta grave.

Desde la cúpula directiva, presidida por Joan Laporta, se insiste en que el Barça confía en poder inscribir a todos los jugadores antes del inicio de la temporada. “Estamos convencidos de que podremos inscribir a todos”, aseguró recientemente el presidente. Pero sin la firma del alemán, los márgenes se estrechan.

Si Ter Stegen no firma el informe y el club no puede certificar oficialmente su baja médica, no podrá liberar la ficha necesaria para inscribir a Joan García ni beneficiarse del alivio económico que permite la normativa de LaLiga en casos de lesión prolongada. Esto podría forzar al Barça a buscar otras salidas (como ventas o cesiones) o incluso a dejar al nuevo portero sin ficha hasta nuevo aviso.

Barcelona anunció la vuelta al Camp Nou

Un divorcio progresivo entre club y jugador

Aunque públicamente el club mantiene un discurso de unidad, lo cierto es que la relación entre Ter Stegen y el Barça se ha ido deteriorando en los últimos meses. Desde el vestuario se percibe cierta incomodidad con la dirección deportiva, y la situación del guardameta es el reflejo de una tensión creciente.

En medio de la pretemporada y a pocas semanas del inicio oficial del curso, el Barça enfrenta no solo un problema deportivo, sino un serio desafío institucional. La guerra abierta con su capitán amenaza con convertirse en un nuevo frente de inestabilidad para un club que aún no ha cerrado su reconstrucción financiera ni deportiva.