Un Rolls-Royce, árboles o ropa para perros: los caros y originales regalos que recibió la familia real británica entre 2020 y 2023

La casa real británica ha publicado esta semana el listado de regalos que recibieron los miembros de la familia real entre 2020 y 2023. Se trata de un importante gesto de transparencia que se da por primera vez desde que Carlos III es monarca.

El registro oficial revela tanto la magnitud como la diversidad de los obsequios que forman ya parte del patrimonio de la Corona británica. Entre los más llamativos se encuentran los que recibió el actual rey con motivo de su coronación, una colección de obsequios procedentes de todas partes del mundo y que abarcan desde objetos de inestimable lujo hasta piezas artesanales profundamente simbólicas.

El presente más llamativo ha sido, sin duda, un Rolls-Royce Cullinan Serie II, valorado en más de 300.000 libras esterlinas (casi 360.000 euros), donado por el rey Hamad bin Isa al-Khalifa de Baréin. Este vehículo, de alta gama y diseño exclusivo, se incorpora a la flota de las caballerizas reales y exclusivamente se destinará a usos oficiales, de acuerdo con informaciones difundidas por el entorno palaciego. Junto al lujoso automóvil, el monarca bareiní envió también un reloj decorativo como muestra de deferencia hacia su homólogo británico.

Sin embargo, el abanico de regalos va mucho más allá del lujo automovilístico. Representantes de culturas indígenas, como los líderes amazónicos, entregaron a Carlos III una corona confeccionada con plumas, un regalo cargado de simbolismo y tradición. Desde el Pacífico Sur, el presidente de las Islas Marshall sumó al acervo real dos sombreros elaborados a mano con hojas de coco. Ambos presentes reflejan la voluntad de rendir homenaje a la figura del monarca desde la óptica de la identidad y el arte local.

El gesto de obsequiar árboles se ha repetido por parte de diferentes mandatarios. Destacan los retoños donados por la familia real sueca y un pino tirolés remitido por el presidente de Austria, un detalle que busca prolongar la huella ecológica de la monarquía en los jardines de las residencias reales.

Otros regalos notables proceden de países como Kuwait y Brunei, cuyos emisarios hicieron llegar una mesa y un modelo de barco, además de una vasija decorativa respectivamente. El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, eligió una opción cargada de simbolismo histórico: una carpeta de cuero que guarda la correspondencia entre la fallecida reina Isabel II y el entonces presidente estadounidense Dwight D. Eisenhower, junto a una fotografía de la histórica visita oficial de este último al Reino Unido. La intención, según fuentes cercanas, era rendir homenaje a las relaciones bilaterales entre ambos países y al legado de la Reina Madre.

El registro publicado incluye también los obsequios recibidos por Isabel II en sus últimos años. Durante el jubileo de platino, la histórica soberana recibió tres broches: uno realizado en oro blanco, platino y diamantes de la Goldsmiths’ Company; uno de diamantes y platino de la masonería; y otro de platino, perlas y diamantes procedente de la Royal Liverpool Philharmonic. Estas joyas, según la normativa vigente, se incorporarán a la colección real y podrán ser portadas en el futuro por otros miembros de la familia Windsor.

Un regalo especialmente significativo llegó desde China: el presidente Xi Jinping envió un adorno de cloisonné con la forma de un zun, una antigua vasija de vino decorada con motivos que, en la cultura china, evocan la realeza y la buena fortuna.

Detalles originalísimos figuran en la lista, como el lote de seis chaquetas de distinto tamaño para perros, enviado por la Fuerza Aérea Australiana a la reina en 2021. Ese mismo año, el presidente Biden y la primera dama Jill Biden, tras un té en Windsor, regalaron una caja de plata Tiffany personalizada y un broche floral.

Camila, reina consorte, también ha recibido presentes. Destaca un lote de piedras de lapislázuli donado por el expresidente afgano Hamid Karzai y un broche del príncipe heredero de Kuwait.

Este registro es el primero que se realiza en el actual reinado y abarca obsequios desde el año 2020. La tradición indica que el listado se publique anualmente en la página oficial de la familia real, pero la pandemia, unida a la muerte de Isabel II y la posterior coronación, provocó un retraso en su publicación.

En virtud de la normativa, todos estos regalos pasan a formar parte de la colección real y no pueden ser vendidos ni transferidos. El patrimonio permanecerá bajo custodia para las futuras generaciones de la familia Windsor y, en última instancia, para la nación.