
“Pensaba que sabía mi color de piel hasta que llegué a Estados Unidos”, dice Mariona Falomi (@marionsfalomi), una joven española que desde hace tiempo vive en el país norteamericano. La muchacha utiliza la red social TikTok para contar sus experiencias internacionales y, en un reciente vídeo subido a la plataforma, asegura que para sus vecinos estadounidenses ella no es blanca.
“En este país, no entendemos por qué en cada sitio que vas, ya sea carné de conducir, sea de la universidad, cosas sociales, papeles, trámites, te piden siempre como de qué color es tu piel o de qué etnia eres: african american, hispanic, latin...“, cuenta junto a una amiga argentina. ”No sé qué interés hay en la raza", apostilla.
La pregunta, según Falomi, aparece en todos los aspectos de su vida, “hasta en aplicaciones de citas”, y en muchos casos no sabe qué contestar. “Un día estuve en una discusión con alguien que me dijo ‘You are not white’ [’No eres blanca’]. ¿Cómo? ¿No me ves? Soy más blanca que la leche. Le dije ‘¿Entonces los de Europa, qué somos?“, cuenta la joven. Pero pese a su piel pálida, nadie la considera como caucásica.
Su compañera argentina lo tiene más ‘sencillo’. “Sé dónde indentificarme. Yo soy latina, ningún problema. Vos sos hispana”, aclara la joven. Pero aun así, ha tenido dificultades: “Me dijeron una vez que yo no era argentina porque yo no era blanca”, dice.

“Nos confunden con estadounidenses todo el rato, porque como somos blancas. Después, cuando saben de dónde somos, ya cambian, ya no somos blancas, ya somos, no sé, extraterrestres”, se queja la española.
¿Por qué los españoles no son blancos en Estados Unidos?
Alejandro Macarrón, coordinador del Observatorio Demográfico CEU-CEFAS, explicó en una entrevista con 20 minutos que, en Estados Unidos, existen dos denominaciones principales para las personas de origen latinoamericano: hispano y latino. Aunque “la oficial es hispano y es la que se suele utilizar en los documentos oficiales”, en el habla cotidiana se prefiere el término latino.
La Oficina del Censo de Estados Unidos ha utilizado históricamente estas categorizaciones en sus estudios, permitiendo a las personas identificarse como hispanas o caucásicas, según su percepción personal. Macarrón, quien vivió y trabajó en Estados Unidos, recordó que durante su participación en un censo, tuvo la opción de declararse como hispano o caucásico, lo que indica que “en realidad era algo voluntario”. Esta flexibilidad en la autoidentificación ha sido un aspecto importante en la recopilación de datos demográficos en el país.
Hasta el año pasado, la Oficina del Censo diferenciaba entre ‘raza’ y ‘etnia’, permitiendo que una persona pudiera considerarse de etnia hispana y raza blanca al mismo tiempo. Una de las preguntas del censo era: “¿Tiene origen hispano, español o latino?”, con opciones de respuesta que incluían mexicano, puertorriqueño, cubano, y otros orígenes hispanos, latinos o españoles.
Pero una nueva revisión de las normas ha ajustado las definiciones. Ahora, el término “blanco” se refiere a personas con orígenes en los pueblos originarios de Europa, como ingleses, alemanes, italianos, entre otros. Por otro lado, “hispano o latino” incluye a personas de origen o cultura mexicana, puertorriqueña, salvadoreña, cubana, dominicana, guatemalteca, y de otros países de América Central o del Sur, así como de España. Esta redefinición ha generado discusiones sobre la inclusión de los españoles en el grupo hispano/latino, mientras que otros grupos europeos, como los italianos, se mantienen en la categoría de blancos.