Ahora que poco a poco se va acercando el buen tiempo y cada vez queda menos para verano, las moscas y los insectos intentan entrar en el hogar, algo que es frustrante, sobre todo, cuando no conseguimos echarlos. Además de ser un incordio, las moscas domésticas también pueden transmitir enfermedades, tal y como explican los expertos de Raid.
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Estos insectos pueden transportar bacterias y otros microorganismos que provocan enfermedades, acumulándolos en lugares donde suelen alimentarse y reproducirse como la basura, las heces y los animales muertos. Como se posan en diferentes superficies, transfieren estos contaminantes a través de su cuerpo, vómitos o heces.
El truco para infalible para eliminar las moscas
Sin embargo, este verano ahuyentar a estos seres insoportables de nuestros hogares será una tarea sencilla. Según apuntan los profesionales de Ideal Home y recoge el periódico británico Daily Express, sólo necesitarás un producto básico de la nevera: el pepino. “Las moscas domésticas se repelen con el aroma de los pepinos, especialmente las variedades más amargas“, apunta Glen Peskett, un experto en bricolaje.
A pesar de que la razón exacta por la que a estos bichos les espanta esta fruta no se sepa, el entendido comenta que se cree que la clave reside en la piel. La cáscara tiene unos compuestos naturales, las cucurbitacinas, que podrían producir un olor desagradable para las moscas y que evitan instintivamente.
Dónde colocar el pepino para ahuyentar a las moscas
La ubicación del pepino también es importante, puesto que, evidentemente, si lo dejamos en la nevera de nada servirá. El mejor lugar para colocarlo es cerca de los puntos de la entrada a la vivienda, por ejemplo, junto a las ventanas. También se deben situar cerca de lugares donde las moscas puedan sentirse atraídas, como los cubos de basura o los fruteros. No basta con poner la pieza entera, habrá que cortarla en rodajas y reemplazarlas cada dos o tres días para evitar que se pudran.
Otros métodos para ahuyentar a las moscas de casa
Otro método eficaz —aunque parezca raro— es el de colocar unas monedas en una bolsa con agua y colgarla cerca de una ventana. Funciona porque las moscas perciben el mundo, aprovechando su visión compuesta. Tienen dos ojos que, en realidad, están formados por miles de pequeñas lentes, lo que les permite ver en gran cantidad de direcciones a la vez y detectar objetos en enormes cantidades de detalle.
Cuando el insecto observa la bolsa, la luz reflejada y refractada por el agua la hace ver una masa más grande de lo que realmente es. Este efecto visual, generado por las monedas de dentro, crea un prisma de colores que le confunde. Como resultado, percibe que hay algo que no puede acercarse a, lo que le hace alejarse y evitar acercarse a una ventana abierta.
Asimismo, es efectivo utilizar una mezcla de hierbas y aceites esenciales. Las moscas tienden a evitar ciertos olores, como los de la albahaca, la menta, el laurel o el eucalipto. Puedes colocar plantas frescas de albahaca en ventanas o preparar un spray casero con agua y unas gotas de aceite esencial de menta o eucalipto. Rocíalo en las áreas donde suelen entrar, como las ventanas y puertas. De esta manera, perfumarás la casa también.
