El Gobierno destina 1.000 millones para los nuevos satélites espías del Ejército: el mayor proyecto espacial de España

El programa ‘Paz II’ será gestionado por Hisdesat, empresa responsable de los satélites ‘SpainSat NG’. Más del 60% de los componentes de los futuros sistemas serán de fabricación nacional

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(Imagen Ilustrativa Infobae)
(Imagen Ilustrativa Infobae)

El Gobierno continúa engrosando el gasto militar que tanto le reclaman sus socios, tanto en la OTAN como en la Unión Europea, y, por el momento, lo está haciendo mediante la inversión de proyectos tecnológicos de uso dual, tal como prometió Pedro Sánchez ante el Congreso. Así, el Consejo de Ministros ha dado el visto bueno al desembolso de 1.011 millones de euros para que el Ministerio de Industria y Turismo financie el desarrollo del programa Paz II, que implica el diseño y construcción de dos nuevos satélites de Observación de la Tierra para las Fuerzas Armadas, que serán lanzados al espacio entre 2030 y 2032.

De acuerdo a lo informado por el Ejecutivo, este proyecto, cuyo dinero será devengado entre 2025 y 2032, dará continuidad y mejorará las capacidades de observación de la Tierra que proporciona actualmente el satélite Paz I, en servicio desde 2018 y cuya vida útil finalizará previsiblemente a final de la actual década. De esta manera, afirman desde La Moncloa, el Ministerio de Defensa y otros organismos gubernamentales mantendrán “la capacidad actualmente disponible, de obtención de imágenes radar desde el espacio con el fin de proteger los intereses esenciales de la defensa nacional”.

El desarrollo de Paz II estará a cargo de Hisdesat, la empresa responsable del Paz I y de los dos satélites SpainSat NG, el primero de los cuales fue puesto en órbita el pasado enero. La compañía es propiedad -en un 43%- de Hispasat, firma que fue adquirida por Indra en febrero, como parte de los planes de la empresa de Ángel Escribano por crecer en el sector de servicios satelitales.

Desde Hisdesat siempre han defendido que el programa Paz II será el mayor proyecto jamás emprendido por la industria espacial española, que se espere esté involucrada en el diseño y fabricación de los satélites en más de un 60%, tal como destacó el CEO de la compañía, Miguel Ángel García Primo, en una entrevista con Infobae España, en plena negociación con el Ministerio de Defensa sobre la configuración de los satélites y el presupuesto necesario para su desarrollo. En aquella oportunidad, García Primo sostuvo que se hablaba de una horquilla de entre 1.200 y 1.700 millones de euros, dependiendo de las capacidades y características finales que escogiese el departamento de Margarita Robles.

Más de 150.000 imágenes en siete años

Actualmente España dispone del satélite Paz I, el primer sistema nacional de observación de la Tierra que, desde su puesta en órbita en febrero de 2018, ha tomado más 150.000 imágenes por encargo de Defensa para cubrir sus necesidades relacionadas con inteligencia militar: apoyo de las misiones de las Fuerzas Armadas en el exterior, control de fronteras o vigilancia de movimientos marítimos en el marco de operaciones de defensa internacionales.

Despega hacia el espacio el nuevo satélite del Ejército español: lanzado con éxito el Spainsat NG I.

Además de prestar servicio a Defensa, ha facilitado imágenes a los Ministerios de Interior, Asuntos Exteriores, Transportes, Hacienda, así como a diferentes organismos autonómicos. También colabora estrechamente con organismos internacionales como la Agencia Europea de Seguridad Marítima, la Agencia Espacial Europea, el Centro de Satélites de la Unión Europea, la OTAN o la NASA.

Durante estos siete años de operaciones, Paz I ha trabajado para usuarios tanto públicos como privados de más de 25 países: Estados Unidos, Canadá, Italia, Reino Unido, Noruega, Méjico, Chile o Sudáfrica son algunos de ellos. En el ámbito civil, los usuarios de Paz han crecido exponencialmente desde el inicio de sus operaciones gracias a las posibilidades de su tecnología radar, que permite captar imágenes tanto de día como de noche, y con independencia de las condiciones meteorológicas.

En total, el satélite ha proporcionado en este lustro 54.000 imágenes relacionadas con la gestión de riesgos y emergencias, la supervisión medioambiental, el control de infraestructuras críticas y obra civil o la vigilancia marítima, entre otras. En septiembre de 2023, Defensa prorrogó -mediante el desembolso de 133 millones de euros- el uso del Paz I hasta 2028, con la idea de que ese año entrara en funcionamiento su sucesor, algo que se espera suceda finalmente en 2030.