
La casa real de Suecia ha anunciado oficialmente cuándo y dónde se celebrará el bautizo de la princesa Inés, cuarta hija del príncipe Carlos Felipe y la princesa Sofía, que llegaba al mundo el pasado 7 de febrero. La elección de la fecha y del emplazamiento no es casual, pues se trata de un día y un lugar con mucho significado para los príncipes.
Tal y como ha confirmado el Palacio Real sueco, el bautizo de la princesa Inés se llevará a cabo el próximo viernes 13 de junio en la capilla del Palacio de Drottningholm, en Estocolmo. De esta manera, la celebración coincidirá con el décimo aniversario de la boda de Carlos Felipe y Sofía, que contrajeron nupcias el mismo día y en la misma localización en 2015.
Con la decisión de unir ambas celebraciones, Carlos Felipe y Sofía reunirán a la familia real en un evento que sin duda estará impregnado de momentos especiales y recuerdos emotivos para la pareja. El bautismo será presidido por el obispo Johan Dalman, capellán principal, y Michael Bjerkhagen, capellán ordinario de la Corte Real. Tras la ceremonia religiosa, se llevará a cabo una recepción y un almuerzo privado en honor de la princesa Inés, quien nació el pasado 7 de febrero y tendrá cuatro meses de edad en el día de su bautizo.

Los príncipes Carlos Felipe y Sofía tendrán la responsabilidad de elegir a los padrinos de la princesa Inés, una elección que podría incluir tanto a familiares cercanos como a figuras importantes de otras casas reales o amigos íntimos de la pareja. Este rol conlleva una gran significación dentro del entorno real y forma parte fundamental de los bautizos en la familia.
Un vestido con historia
Como marca la tradición de la realeza sueca, la princesa Inés lucirá el histórico vestido de bautizo real, una prenda confeccionada en 1906 que ha sido utilizada por más de 20 miembros de la familia real durante el último siglo. Este vestido está elaborado con batista de algodón y encaje de Valenciennes y posee una prenda interior de seda. Entre los que han portado esta pieza figuran los hermanos mayores de la princesa Inés: el príncipe Alejandro, de ocho años; el príncipe Gabriel, de siete; y el príncipe Julián, de cuatro. El príncipe Julián, bautizado en 2021, fue el último en usar este símbolo de la monarquía sueca.

Aunque no recibió el título de Su Alteza Real, la princesa Inés fue nombrada duquesa de Västerbotten por su abuelo, el rey Carlos XVI Gustavo. El monarca dio a conocer el nombre completo de su nieta tres días después de su nacimiento, aunque en un error puntual se refirió a ella como “princesa Inse”. La duquesa de Västerbotten se une al ya amplio círculo de nietos del soberano, que incluye a los hijos de la princesa heredera Victoria y el príncipe Daniel: la princesa Estelle, de 13 años, y el príncipe Oscar, de nueve, así como a los hijos de la princesa Magdalena y Christopher O’Neill: la princesa Leonore, de 11; el príncipe Nicolás, de nueve; y la princesa Adrienne, de siete.