
Hollywood ha aterrizado en First Dates de la mano de Pietro, un italiano procedente de Milán que vive en España desde hace tres años. El joven de 23 años ha pisado fuerte desde el primer minuto que ha parecido en pantalla. Y es que el chico ha dejado sorprendido a Carlos al decirle que ha pasado de ser “pastelero, pizzero…” hasta llegar a su profesión soñada: ser stripper. “No tenía seguridad y ahora he cambiado”, ha comentado frente a la cámara.
Además, ‘Magic Peter’, su apodo artístico que recuerda mucho a la película de Channing Tatum, Magic Mike, ha confesado que lo que busca en su pareja es que tenga “buen culo”, así como su fetiche con los pies: “Me gusta tocarlos y chuparlos, depende de la situación”, le ha comentado a Sobera. Mientras tanto, Kimberly se ha presentado como una chica muy sexual que no le tiene miedo a nada.
La joven de 21 años ha comentado igualmente que le gusta mucho trabajar e ir al gimnasio, pero si hay algo que le ha gustado en su paso por el programa ha sido su acompañante: “¡Qué guapo!“, ha exclamado al verle. Asimismo, la soltera, que viene de Las Palmas, también ha sorprendido a Pietro, quien ha tenido una muy buena primera impresión.
“Tiene buen tamaño”

El `pelo moreno y los tatuajes de Pietro han dejado una buena imagen en Kimberly, quien le ha encantado que su cita viviera a en una de las islas de las Canarias, Tenerife. Además, le ha comentado que tiene muchos amigos italianos, pero hasta el momento no ha estado con ninguno. Según ha ido avanzando la velada, el soltero le ha confesado a su acompañante en qué consiste su profesión, algo que le ha fascinado un poco más y ha hecho que gane “un punto extra”. “Siempre que sea para cosas buenas y podamos disfrutar los dos, mejor”, ha añadido después.
Pietro se ha sentido muy aliviado al saber que a su cita le gustase su trabajo y le ha preguntado un poco por ella. “Yo no tengo citas para comer, voy a lo que voy”, le confesó Kimberly, dejando claro que su objetivo era disfrutar del momento sin rodeos. Y es que, la canaria ha explicado que le parece un poco mal que quedar a cenar con alguien con el que solo te vas a acostar, ya que considera que es algo que solo hace “con mi pareja o amigos”, porque “no sirve de nada que te coman la oreja”.
Seguidamente, el italiano la ha preguntado qué es lo que más le gusta de los hombres, a lo que ella ha respondido que “a mí lo que me gusta es lo de abajo, ni el pecho, ni la cara, ni nada...”. Ante esta declaración, Pietro, ha aprovechado para contarle su fetiche por los pies, algo que ha causado un poco de confusión en Kimberly: “¿Qué vas a hacer con mis pies?“.

El momento culminante llegó al final de la cita, cuando Pietro, fiel a su estilo, le ofreció un striptease sorpresa a Kimberly. “Tiene buen tamaño”, exclamó la soltera entre risas, mientras Pietro, en tanga, terminaba su baile. El soltero, visiblemente satisfecho con la reacción de Kimberly, le pidió si había probado un “beso italiano”, lanzándose entonces a un beso que parecía ser el preludio de una nueva cita.
La química entre ambos fue evidente, y al final de la cita, tanto Pietro como Kimberly se mostraron dispuestos a tener una segunda cita. “Nos vemos en Canarias”, dijeron con una sonrisa, dejando en el aire la promesa de un futuro encuentro lleno de sorpresas.