
¿Llega la Semana Santa y no sabes dónde realizar una escapada? Este período festivo que coincide con la entrada de la primavera, las altas temperaturas y, con suerte, días de sol, invita a salir para conocer nuevos rincones. En pareja, con amigos o solo puedes acudir a varios pueblos que se encuentran a menos de una hora de Madrid. Algunos de ellos entre montañas.
Desde el perfil De Ruta por Madrid han dado a conocer tres de estas aldeas, de las cuales dos de ellas no alcanzan ni los mil habitantes: “Son ideales para desconectar”. Además, cuentan con gran interés histórico y gastronómico, donde podrás viajar al pasado y degustar la comida típica madrileña. ¿Cuáles son estos tres pueblos?
1. Castillo de la Coracera, San Martín de Valdeiglesias

A 45 minutos aproximadamente de la capital destaca a lo alto la fortaleza de San Martín de Valdeiglesias: “Es uno de los castillos más desconocidos de Madrid”, ha señalado Laura de @DerutaporMadrid, quien también ha manifestado que le recuerda a Sintra, en Portugal. Destaca que este emblema del pueblo con poco más de 9.000 habitantes “es del siglo XV y tiene mucha importancia histórica”. Además, se puede recorrer entero por dentro.
“Aquí vivió Isabel la Católica”, ha señalado Laura. El castillo ha pertenecido a distintas familias y desde 2003 es propiedad del ayuntamiento de San Martín de Valdeiglesias. Desde De Ruta por Madrid han destacado que “puedes subir a la torre del Homenaje y tendrás unas vistas preciosas de la Sierra”. Sin embargo, “hay que ir agachadito. Las puertas son superpequeñas”. La entrada al castillo cuesta cuatro euros y puedes concertar una visita guiada de manera individual o en grupo.
2. Olmeda de las Fuentes

Este es un pueblo blanco estilo andaluz, muy cerca de Chinchón, al sur de la Comunidad de Madrid. Se encuentra a 50 kilómetros de la capital y a 24 de Alcalá de Henares. “Con todas sus casitas parece que te has transportado” a Andalucía. Cuenta con 409 habitantes y “es famoso por su miel, tiene museo al aire libre y merenderos para hacer picnic” por lo que es perfecto para pasar el día.
Además, si te gusta la naturaleza, Olmeda de las fuentes cuenta con cuatro manantiales. Hasta el 2009, los habitantes de esta aldea bebían el agua de la fuente principal y era la que llegaba a las casas. También puedes optar por recorrer la ruta de los pintores, al ser un rincón en el que se instalaban estos artistas para disfrutar del paisaje y la tranquilidad.
3. Patones de Arriba

El último es un pueblo escondido en las montañas: “A mí me recuerda mucho a Asturias”, ha destacado Laura de De Ruta por Madrid. Este “es un lugar donde el tiempo parece que se ha parado”, ya que sus casas mantienen una esencia que evoca al pasado con casas y calles de piedra.
¿Qué más destaca de este rincón? “Como curiosidad os diré que este pueblecito tuvo un rey”, ha manifestado Laura, quien también ha señalado que “se libró de la conquista francesa porque era inaccesible”. Hay visitas guiadas por tres euros, pero puedes optar por recorrerlo libremente. También “hay sitios para comer o hacer pícnic”.