Humedades, suciedad y tuberías rotas: las familias protestan “por unos baños dignos” en un colegio de Valencia

El CEIP Ciudad de Bolonia espera desde hace tres años la reforma de unos baños “deplorables e insalubres”

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El centro reclama desde hace
El centro reclama desde hace tres años la reforma de sus aseos, que son "un ruesgo para la salud" y "un obstáculo para el aprendizaje". (Montaje Infobae)

El colegio público Ciudad de Bolonia se levantó en 1986 en el barrio de Patraix, en Valencia. Las instalaciones sobreviven en pie desde entonces, sin reformas que las mejoren o ayuden a mantenerlas, pero el paso del tiempo empieza a dejar huella en la infraestructura 40 años después y son los baños los que más lo están sufriendo. En el edificio que acoge a cerca de 200 alumnos de Educación Primaria, los estudiantes encuentran azulejos caídos, lavabos inundados y puertas cerradas con celo, a falta de mejores materiales.

Las familias del AMPA y la dirección del centro llevan más de tres años reclamando la adecuación de los servicios, que “están en condiciones deplorables e insalubres”. Ante la falta de respuesta de las administraciones públicas, han comenzado una recogida de firmas en Change.org con la que exigen la renovación de las instalaciones.

“No ha habido una reforma integral de esos baños. Se hacen pequeños arreglos, que no son suficientes para mantenerlos en buen estado”, explica Chelo, la presidenta de la asociación de madres y padres, a Infobae España. Fue en 2022 cuando la situación se volvió insostenible. “Una tubería produjo unas inundaciones. Lo que hicieron desde el Ayuntamiento fue sacarla por fuera para evitar que el agua se extendiera por los suelos y todo. Pero ese baño lo hemos tenido que cerrar, porque sigue saliendo agua”, cuenta la mujer.

Tubería sellada con cinta adhesiva
Tubería sellada con cinta adhesiva para evitar fugas. (Imagen cedida a Infobae España)

Mientras, los azulejos se desprenden y las cisternas, grifos y pilas se estropean de forma continua. “Los baños están sucios por mucho énfasis que le pongan los chicos de la limpieza, siguen saliendo humedades, olores, bichitos...”, describe. Para evitar que los niños se hagan daño, cubren las zonas peligrosas con cinta adhesiva, “lo único que tenemos”. Esta experiencia desagradable hace que muchos niños aguanten toda la jornada sin ir al baño. “No es cómodo, no están a gusto lavándose las manos”, lamenta.

Azulejos rotos cubiertos con cinta
Azulejos rotos cubiertos con cinta adhesiva. (Imagen cedida a Infobae España)

Sin respuesta de la Generalitat

Pancarta que reclama unos baños
Pancarta que reclama unos baños limpios en el CEIP Ciudad de Bolonia. (Instagram)

Hace tres años que reventó la tubería del baño y, por muchas reclamaciones que hagan, el colegio sigue sin ver las obras puestas en marcha. La dirección envió una solicitud al Plan Edificant, programa de la Conselleria de Educación para mejorar o ampliar la infraestructura educativa. Incluso los niños se han involucrado en las reivindicaciones. “Hace dos años, todos los alumnos de quinto y sexto de primaria le enviaron cartas al director de infraestructuras de la Conselleria y al director de Educación”, cuenta Chelo. También han recibido varias visitas del inspector de Educación, que les ha prometido que “no lo van a dejar pasar”.

“Uso condón porque si no sale una aberración como tú... eres una rata de cloaca”: cuando el acoso en el colegio más elitista de Madrid te obliga a irte del país.

Pero el tiempo ha pasado y los niños siguen utilizando un baño “en condiciones deplorables” que plantea, según las familias del AMPA, “un riesgo para la salud” y “un obstáculo para el aprendizaje en general y la dignidad de los estudiantes en particular”.

Pero la administración pública parece dar largas. La Generalitat asegura desde hace medio año que el proyecto de reforma está “en fase de estudio” y que “tienen prevista la reforma”. Pero los padres y los alumnos no han podido conocer más detalles del asunto, motivo por el que han iniciado una recogida de firmas que roza los 3.000 apoyos. “Esperamos que nos digan algo concreto, que se reúnan con la dirección del centro y nos expliquen qué es lo que van a hacer. Qué mínimo que eso”, reclama la madre.