
Las noticias sobre que un miembro de una casa real espera un hijo siempre son muy llamativas y acaparan titulares. La llegada de un nuevo miembro a las familias más importantes siempre interesa a muchos lectores. Además, la propia realeza desvela con gusto la información, pues el interés en torno a la familia es enorme y un embarazo genera cercanía e ilusión.
Con la llegada de las redes sociales, la vida de la realeza se ha vuelto más accesible. Además de su habitual presencia en revistas y medios de comunicación, ahora cuentan con sus equipos de redes que tratan de transmitir imágenes positivas y ganar el apoyo de los ciudadanos con cercanía en sus perfiles.
Pero hasta hace unos años, se conocía mucho menos de sus vidas privadas. Tan solo las apariciones concretas en los medios servían para dar información. Una de las imágenes que era muy complicado encontrar eran fotografías de las mujeres de la realeza embarazadas.
No podían mostrar su barriga
Vera Guldemeester, periodista holandesa experta en Casa Real, ha explicado por qué era tan complicado encontrar imágenes de royals embarazadas. Si nos vamos unos años atrás, antes de internet, pero cuando ya era común la aparición de fotografías y vídeos de los personajes públicos, nos costará hacernos con una imagen de alguna reina embarazada.
El primer motivo que expone es que existía un enorme tabú en torno a mostrar las barrigas de las embarazadas. Si encima se trataba de una persona de la realeza, debían cumplir las normas sociales de forma más estricta.
Otro factor son las prendas de vestir. Por un lado, se vestía de una forma que se disimulaban las barrigas, y con una mayor cantidad de ropa de forma general. “Luego se hizo todo lo posible para ocultar la barriga, usando varias capas de ropa o ropa más ancha”, ha explicado la periodista.
También han cambiado las opiniones y costumbres. “Entonces no se podía tomar una foto porque eso se consideraba una falta de respeto en el pasado”, ha afirmado Vera, explicando por qué no se tomaban imágenes de las royals en pleno embarazo.
El último causante que ha señalado es que, hace años, reinas como Isabel II o Beatriz de Holanda, reducían de forma muy significativa su trabajo cuando estaban esperando un hijo. Por tanto, dejaban verse menos de cara al público durante los nueve meses de espera.
Comparación de la actualidad
En pleno 2025, el embarazo de una mujer de la realeza es una noticia mostrada en cualquier medio de forma habitual. Ha dejado de ser un tabú para convertirse en una imagen habitual. La reina Letizia, Eugenia de York o Claire de Luxemburgo han mostrado su barriga sin problema alguno.
No solo no lo esconden, sino que ahora, como es normal, comunican con gusto y sin problema sus imágenes para anunciar la buena noticia. Las casas reales también se han adaptado a un cambio de paradigma, en el que las embarazadas son vistas con normalidad, aunque pertenezcan a los estratos más altos de la sociedad.