
En plena polémica con Agatha Ruiz de la Prada y en la promoción de su nuevo libro bibliográfico, Pasión por la vida, Carmen Lomana ha vuelto a ser noticia esta semana al descubrirse quién es la nueva ilusión en su vida: el consultor de estrategia y comunicación, Jesús Arroyo. La empresaria leonesa fue pillada en una posible cita con su amigo especial en Valencia.
Los tortolitos se habrían conocido en una cena con amigos en común en el restaurante Fortunity, situado en pleno paseo de la Castellana de Madrid. Su conexión debió de ser tan fuerte que la comunicadora y el consultor han tenido distintas quedadas donde se les han visto muy juntitos. Uno de sus últimos encuentros tuvo lugar en una corrida de toros de Valencia, un momento que compartió ella misma en su cuenta oficial de Instagram.
No obstante, tras unas preguntas de Europa Press, la empresaria dejó claro que quería mantener la mayor intimidad posible en esta nueva relación: “Yo no he dicho que esté enamorada, simplemente estoy disfrutando de la vida“, le dijo a la periodista que la entrevistó.
“Un entrenador en estrategia y mentalidad para tenistas”

Aunque la leonesa nunca ha tenido problemas para ir en solitario de compras o a las alfombras rojas, ahora la colaboradora de programas de corazón ha puesto su mira en Jesús Arroyo Fernández. Tal y como se describe él mismo en una de sus publicaciones en Instagram, “soy un entrenador en estrategia y mentalidad para tenistas de élite”. Desde España, el empresario se dedica a entrenar, porque no basta con ser consciente o recibir clases teóricas, se trata de entrenar y de desarrollar la mente con ejercicios y con herramientas prácticas", ha añadido.
En el vídeo que publicó el pasado mes de noviembre anunció que ayudaría a “chicos y chicas federados en México y también a todo su entorno para conseguir esta fortaleza mental, este desarrollo con el que poder afrontar con éxito esos partidos importantes y esos campeonatos”. Lo más importante de esta iniciativa es que “el de mañana, se dediquen o no al tenis”, van a poder “alcanzar todo su potencial”. Y es que, según Arroyo “El 80% del éxito de un tenista de élite depende de su mentalidad y de su fortaleza mental”, ha apuntado.
Una cita con compras, joyas y lluvia

Para sorpresa de la parejita, el equipo de Europa Press capturó a los empresarios el pasado sábado 22 de marzo dando un paseo bajo la lluvia del cielo madrileño. Los dos abandonaron el domicilio de Lomana y fueron en taxi a la Mailla de Oro debido al temporal. En el barrio más caro de la capital, los tortolitos hicieron una primera parada en la boutique de Fendi. La leonesa estuvo amarrada al brazo de Arroyo hasta llegar al interior de la tienda de lujo, mientras su acompañante sostenía el paraguas que les protegía de la llovizna.
Una vez dentro, observaron algunos productos de la nueva temporada de la firma de lujo. Cuando terminaron el objetivo de la primera parada, se dirigieron juntos hasta una joyería cercana, aunque de nuevo, en taxi. Carmen estuvo analizando varias piezas de alta calidad, junto a Jesús, que no dejó de prestarle atención en toda la tarde.