
La incertidumbre sobrevuela más que nunca el continente europeo debido al nuevo mapa geopolítico derivado tras la reelección de Donald Trump al frente de la Casa Blanca y su acercamiento a Rusia. Es por eso que, más allá del rearme de los países de la Unión Europea, cuya propuesta aún está por definir, Bruselas ya prepara una nueva Estrategia de Preparación de la Unión para trasladar la responsabilidad de la defensa también a los ciudadanos.
Este plan, que se presentará este miércoles y busca fortalecer la capacidad de respuesta ante escenarios como desastres naturales, ciberataques, pandemias o incluso agresiones armadas, recomendará que los hogares europeos almacenen suministros esenciales como agua, alimentos, medicamentos y baterías suficientes para sobrevivir al menos 72 horas sin ayuda externa. Según El País, la directriz contempla hasta 30 medidas, entre las que figuran la propia preparación civil, maniobras conjuntas o cursos especializados para jóvenes y adultos.
Asimismo, el Ejecutivo francés prepara un manual de supervivencia para grandes emergencias, que repartirá a sus ciudadanos en los próximos meses. Antes, países como Suecia, Finlandia, Dinamarca y Noruega hicieron lo propio para preparar a sus conciudadanos ante posibles catástrofes naturales, ciberataques graves o un conflicto bélico.
Sobre la opción de que España se sume, el Gobierno ve “lógico” que la Comisión Europea haga “recomendaciones” para la población en caso de emergencia, pero ha querido lanzar un “mensaje de tranquilidad” a los ciudadanos. En palabras de la vicepresidenta primera, María Jesús Montero, “estamos pendientes, estamos alerta y estamos trabajando por la paz”, ha agregado este martes en los pasillos del Senado.
La dirigente socialista ha reconocido que estamos viviendo un momento de “gran incertidumbre” al que asisten “con una importante preocupación”. En esta línea, ha recordado que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, comparecerá este miércoles en el Congreso para dar cuenta de la posición de España ante el incremento del gasto militar, además de viajar el jueves a una nueva cumbre en París para abordar la escalada bélica a nivel internacional.
Planes especiales más allá del estatal
Más allá de que España finalmente lance una guía específica para los ciudadanos, cabe recordar que este país cuenta con un Plan General de Emergencias del Estado (PLEGEM), que se activa en casos de desastres naturales, accidentes de gran magnitud, emergencias tecnológicas o sanitarias, etc. “El PLEGEM va a permitir atender emergencias inespecíficas y de naturaleza multirriesgo a las que los planes ordinarios no dan una respuesta específica, incluidas aquellas con baja probabilidad de que sucedan, pero de muy alto impacto”, defendió el Gobierno.
A propuesta del Ministerio de Interior, el Consejo de Ministros aprobó el 15 de diciembre de 2020 un programa para “mejorar la coordinación de las administraciones que participan en el Sistema Nacional de Protección Civil e integrarlo en el Sistema de Seguridad Nacional”, dando lugar a la creación del Mecanismo Nacional de Respuesta en Emergencias. Para el Ejecutivo, la crisis sanitaria de la covid-19 es un “ejemplo de este tipo de emergencias” y, de hecho, la experiencia adquirida durante la pandemia fue “muy útil para la elaboración de este Plan”.
Las medidas de intervención y protección aplicables en las activaciones de este PLEGEM son la información y avisos a la población; control de accesos y seguridad ciudadana; confinamiento; alejamiento; evacuación; albergue; medidas de Autoprotección. “El Ministerio del Interior promoverá la elaboración de guías técnicas de información y avisos a la población, que serán responsabilidad de cada Administración Pública u Organismo competente por razón de la materia o del territorio”, añade el plan.
Más allá de este, el Sistema de Protección Civil cuenta con planes territoriales, de ámbito autonómico o local; Especiales; y de Autoprotección. En cuanto a los segundos, estos sirven para hacer frente a los siguientes riesgos: inundaciones, terremotos, maremotos, volcánicos, fenómenos meteorológicos adversos, incendios forestales, accidentes en instalaciones o procesos en los que se utilicen o almacenen sustancias químicas, biológicas, nucleares o radiactivas; accidentes de aviación civil; transporte de mercancías peligrosas; así como los relativos a la protección de la población en caso de conflicto bélico y “aquellos otros que se determinen en la Norma Básica”.
Otros ‘kits’ de supervivencia para lugares peligrosos
Por otro lado, el Gobierno de España, a través del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, ha desplegado diferentes guías de recomendación para los españoles que viajen a las distintas zonas del mundo. El departamento liderado por José Manuel Albares aclara que estas pautas carecen de efecto “vinculante” y operan como “mero aviso o consejo”.
“El Estado no resultará responsable por ningún concepto de los daños o perjuicios que, tanto por la observancia como por desconocimiento o no atención de la recomendación, pudieran ocasionarse a personas o bienes, no considerándose dicha recomendación, título que ampare reclamación alguna”.
De esta manera, en muchas de ellas se recuerda que “ninguna región del mundo y ningún país están a salvo de posibles actos terroristas”. Para países en los que el riesgo de terremotos es constante y muy elevado (lo que hace que también haya riesgo de tsunami y de erupciones volcánicas), como Nueva Zelanda, el Gobierno desarrolló una Guía de Emergencia para catástrofes naturales.
Para el caso de catástrofe natural, el plan contiene las siguientes medidas:
Prepare un Plan de emergencia para usted y su familia.
Prepare un equipo de supervivencia o de emergencia para su hogar.
Tenga listo un equipo mínimo para caso de evacuación.
Revise periódicamente el plan, incluyendo con su familia y equipo de trabajo en su caso, y los equipos.
En caso de emergencia, contacte al centro de Defensa Civil más cercano y siga sus instrucciones y consejos.
Si desea contactar con la Embajada, se recomienda hacerlo por correo electrónico. Tenga en cuenta que la Embajada actuará siguiendo las instrucciones e indicaciones de Defensa Civil y las autoridades neozelandesas, que son la primera respuesta a la emergencia, independientemente de su nacionalidad.
Dentro del kit de supervivencia, según las recomendaciones de Defensa Civil de Nueva Zelanda, el Ejecutivo recuerda incluir: tres litros de agua por persona y día, pastillas potabilizadoras de agua, radio y linternas con pilas de repuesto; ropa adicional para cada miembro de la familia; toallas y mantas; botiquín de primeros auxilios; artículos de higiene personal, alimentos no perecederos; o dinero en efectivo.
Otro ejemplo, el de Reino Unido, una región especialmente sensible a las inundaciones que se producen todos los años en diversas áreas de este. Exteriores recuerda que el público es “generalmente advertido con anticipación de estas y de los inconvenientes que ocasionan, especialmente en vías férreas y carreteras, por lo que hay que estar atentos a las indicaciones de las Autoridades a través de los medios de comunicación. Los territorios Británicos de Ultramar (BTO) del Caribe pueden verse afectados (a veces, severamente) por la temporada de huracanes que, por lo general, se extiende desde junio a noviembre”.
Exteriores también pone el foco en la inseguridad ciudadana que azota a ciertos países, como Colombia, donde “la suma de delincuencia común, guerrilla, narcotráfico y otros grupos irregulares definen un especial clima de violencia e inseguridad en diversas zonas del país”.