Un lustro sin Lucía Bosé: la situación de su familia y la venta de su gran legado

La actriz italiana, madre de Miguel Bosé, murió el 23 de marzo de 2020 por una neumonía derivada del coronavirus

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Lucía Bosé, en 2019. (Foto
Lucía Bosé, en 2019. (Foto AP/Alessandra Tarantino)

Lucía Bosé llevaba unos años alejada de los medios, disfrutando de un merecido retiro en su casa de Segovia, en el pueblo de Brieva, cuando se conoció la triste noticia de su muerte. Era el 23 de marzo de 2020 y fue su hijo más conocido, Miguel Bosé, quien anunciaba su pérdida en las redes sociales: “Queridos amigos... os comunico que mi madre Lucía Bosé acaba de fallecer. Ya está en el mejor de los sitios”.

Según se conocía poco después, la actriz italiana llevaba varios días ingresada en un hospital de Segovia por una neumonía que finalmente provocó su fallecimiento y que estuvo provocada por el coronavirus. Aunque tuvo la enfermedad, su hijo lo negó por activa y por pasiva, afirmando que “mi madre no tenía coronavirus, mi madre no se murió de Covid. Y eso tiene que parar ya”. El cantante, famoso en los últimos años por su pos aseguró que murió por otras causas que, de hablarlas, serían “tremendamente peligrosas para las personas que cuidaron de ella”, y contó que falleció sedada.

Una gran familia muy poco unida

Lucía Bosé dejó un legado familiar que sigue presente gracias al apellido. Su hijo mayor, Miguel Bosé, ha tenido una vida familiar marcada por su música, pero también por su vida personal tras convertirse en padre por gestación subrogada. A día de hoy reside en América con dos de sus hijos, los gemelos Diego y Tadeo, mientras que los otros dos, Ivo y Telmo, viven en España con su padre biológico. Esta situación llegó incluso a los tribunales, pues hasta hace poco, cuando rompieron su relación tras más de 25 años juntos, los cuatro hermanos vivían juntos.

Miguel Bosé en la Casa
Miguel Bosé en la Casa Azul de Frida Kahlo, junto a su madre, Lucía Bosé. (Instagram)

Sus dos hijas, Paola y Lucía Dominguín, también han seguido sus propios caminos. Lucía es la más mediática de las dos acaba de publicar un libro de recetas junto a dos de sus hijas, Jara y Palito.

Paola Dominguín, por su parte, vive en un discreto segundo plano, disfrutando de la vida y compartiendo algunos retazos en las redes sociales.

La venta de su gran legado

La Casa Azul de Lucía Bosé, situada en Brieva, un pintoresco pueblo de Segovia, fue mucho más que su residencia; fue el hogar en el que la actriz vivió durante varias décadas y el refugio donde encontró paz en sus últimos años.

Patio de la casa de
Patio de la casa de Lucía Bosé en Brieva. (Escapada Rural)

Esta vivienda, que se caracterizaba por su distintivo color azul y su ambiente íntimo, no solo fue un lugar de descanso, sino un reflejo de su carácter y su vida, donde la cultura y la naturaleza se fusionaban. Lucía vivió aquí hasta su fallecimiento en 2020, y ahora, tras la venta de la propiedad en 2022, la Casa Azul es un alojamiento rural que mantiene su esencia y ofrece a los visitantes un pedazo de su historia.

Se trata de un chalet de 430 metros cuadrados distribuido en tres plantas, con una parcela de 315 metros cuadrados. Tras su venta en 2022, los nuevos propietarios han respetado tanto la distribución original como los elementos más representativos del hogar, incluida su característica tonalidad azul, presente en cada estancia de la casa. Aunque se ha adaptado para acoger a hasta 28 personas, se han mantenido detalles distintivos que rememoran el legado de la actriz.

En la planta baja, destaca una cocina abierta y un salón con chimenea, donde aún se conserva un fresco del artista italiano Emilio Farina, una valiosa obra de arte que decora este espacio. El salón da acceso a un patio interior con comedor, y en esta planta también se encuentran una habitación con baño y un aseo. Elementos decorativos como la fuente en el patio y la estructura dorada que adorna una cama de dormitorio continúan presentes, aportando un toque de la personalidad de Lucía Bosé.

Buhardilla con literas y un
Buhardilla con literas y un sofá-cama. (Escapada Rural)

En la segunda planta, se encuentran tres dormitorios con baño independiente y vestidor, mientras que la buhardilla superior, con un diseño diáfano, ha sido acondicionada con literas y sofás para recibir a los huéspedes.

Todo aquel que quiera pernoctar en esta particular estancia, podrá hacerlo por un precio que ronda los 650 euros la noche. Sin embargo, en temporada alta es obligatorio reservar por un mínimo de dos noches, por lo que en el período navideño el desembolso mínimo será de 1300 euros para hasta 18 personas, mientras que el precio se incrementa con cada cama adicional hasta los 1900 euros que cuesta alojar a 28 huéspedes.