
El ecosistema del planeta Tierra se está viendo transformado por la actividad humana. La construcción de infraestructuras y los proyectos urbanísticos afectan de forma directa, pero hay otras consecuencias que no ligamos a nuestros procesos, pero que están totalmente relacionadas.
De la misma forma, el ser humano depende de su fauna y flora. La desaparición de una especie siempre es una terrible noticia en sí misma. No obstante, en muchas ocasiones no somos conscientes de los nefastos resultados que puede provocar, a nivel global, en la propia vida de los humanos.
En España, la última especie que ha entrado en un gran peligro son los gorriones. Estos pájaros son un animal muy característico del país, pues son parte fundamental de la armonía de las ciudades. Por ello, su reducción supone una mala noticia por distintos motivos.
Un enorme descenso del número de gorriones
La Sociedad Española de Ornitología (SEO/Birdlife) ha denunciado que la población de gorrión común en España ha descendido en un 20% los últimos 25 años. En la actualidad, se estima que hay unos 30 millones de ejemplares. Esta pérdida de los últimos años supone que han muerto entre 6 y 7 millones de gorriones.
Aprovechando que el pasado jueves 19 de marzo fue el Día Mundial del Gorrión, la SEO/Birdlife ha puesto sobre la mesa esta problemática. Su directora ejecutiva, Asunción Ruíz, ha emitido un comunicado de prensa, donde cuenta los principales motivos y consecuencias de esta pérdida.
Para empezar, ha explicado que su desaparición “no sólo una mala noticia para la biodiversidad, sino también una señal de amenaza” para la calidad de vida. También ha asegurado que “son un excelente indicador de si las ciudades cuentan con aire limpio, agua de calidad y un entorno saludable”.
Causa y soluciones
El motivo principal que está perjudicando a estas aves es la contaminación de las ciudades. Su presencia en los entornos urbanos es imprescindible, pero se están encontrando con un aire sucio que dificulta su adaptación. Según la organización, esto es un reflejo de la “crisis ambiental en los entornos urbanos” derivada de la contaminación y la falta de espacios verdes.
SEO/Birdlife ha propuesto aumentar los corredores ecológicos urbanos o incorporar tejados ajardinados y fachadas vegetales, entre otras alternativas. El objetivo es construir entornos y lugares que permitan a esta especie desarrollarse dentro de las grandes metrópolis.

Por otro lado, han pedido que el Plan Nacional de Restauración tenga en cuenta la protección de la biodiversidad en las ciudades, en línea con el Marco Global de Biodiversidad y con el Reglamento Europeo de Restauración de la Naturaleza.
Además, recuerdan que la rehabilitación de edificios debe garantizar también la conservación de las especies urbanas y ofrecen una guía técnica para ayudar a profesionales y propietarios a fomentar la biodiversidad, y una web con un catálogo de las principales especies de aves y murciélagos que emplean los edificios para su supervivencia.
Los gorriones han visto crecer las ciudades como cualquier vecino y ciudadano. Se han ido adaptando a los cambios, pero cada vez resulta más complicado.