
Los ciudadanos extranjeros que viven legalmente en España deben renovar su permiso de residencia de forma periódica para mantener su situación administrativa regularizada. Se trata de un trámite obligatorio, y no hacerlo puede conllevar sanciones, incluida la posible pérdida del derecho a residir en el país. El proceso de renovación varía según el tipo de permiso otorgado —temporal, de larga duración o por circunstancias excepcionales— y exige cumplir determinados requisitos y plazos establecidos por la normativa de extranjería.
Los permisos de residencia en España se clasifican principalmente en dos tipos: residencia temporal y residencia de larga duración. Ambos están dirigidos a ciudadanos extracomunitarios, ya que los nacionales de países de la UE, del Espacio Económico Europeo y de Suiza tienen derecho a la libre circulación dentro del territorio comunitario, lo que simplifica su proceso de registro como residentes.
La residencia temporal autoriza a permanecer en España por un periodo superior a 90 días e inferior a cinco años, sin perjuicio de lo establecido en materia de estancia por estudios, movilidad de alumnos, prácticas no laborales o servicios de voluntariado. Sobre la residencia temporal, esta puede ser no lucrativa, de reagrupación familiar, con excepción de la autorización de trabajo o por circunstancias excepcionales.
Por su parte, la residencia de larga duración permite a los extranjeros vivir y trabajar en España. Para acceder a este permiso, es necesario haber residido legalmente en el país durante al menos cinco años de forma continuada, además de acreditar medios de vida y otros requisitos exigidos por la ley.
Cómo hacer la renovación
Como se explica en la web del Ministerio de Interior, la renovación de los permisos de residencia en España debe realizarse dentro de los plazos establecidos por la normativa de extranjería, según el tipo de autorización y el régimen aplicable. Incumplir los plazos puede acarrear sanciones administrativas e incluso la pérdida del derecho a residir legalmente en el país.
Renovación de residencia y trabajo por cuenta ajena o propia
Las autorizaciones de residencia y trabajo deben renovarse durante los 60 días naturales previos a su caducidad. También es posible presentar la solicitud dentro de los 90 días posteriores, aunque esto puede implicar la apertura de un procedimiento sancionador. Durante el proceso de renovación, si la solicitud se presenta dentro del plazo, la validez de la autorización se prorroga automáticamente a efectos laborales y de Seguridad Social hasta la resolución del expediente.
Residencia de larga duración
Si el extranjero cumple los requisitos de residencia de larga duración al mismo tiempo que caduca su permiso actual, podrá presentar la solicitud durante los 60 días previos o en los 90 días posteriores a esa fecha. Si los requisitos se cumplen en un momento distinto a la caducidad del permiso, la solicitud puede presentarse en cualquier momento, aunque no es compatible con la vía telemática.
Régimen comunitario: tarjeta de familiar de ciudadano de la UE
Para renovar la tarjeta de familiar de ciudadano de la Unión Europea, el plazo va desde un mes antes de la fecha de caducidad hasta tres meses después. La solicitud fuera de plazo puede conllevar sanciones. Cuando la tarjeta tiene una validez inferior a cinco años, debe renovarse; si tiene una vigencia de cinco años, corresponde solicitar la tarjeta permanente, renovable cada diez años.
Presentación de solicitudes
Existen dos formas de presentar las solicitudes:
- Vía telemática, a través de la plataforma Mercurio. En algunos casos, también se permite el uso del Registro Electrónico.
- Presencialmente, en la Oficina de Extranjería correspondiente. Algunas oficinas requieren cita previa, que puede gestionarse en el sitio web del Ministerio.