
Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) ha confirmado la procedencia del despido disciplinario de un trabajador de El Corte Inglés, que fue despedido en julio de 2023 tras descubrir que estaba involucrado en prácticas comerciales irregulares mediante su empresa 2MP. Esta decisión, dictada en la sentencia número 77/2025, desestimó el recurso interpuesto por el trabajador contra un fallo previo del Juzgado de lo Social nº 42 de Madrid, que ya había avalado la legalidad de la decisión empresarial. La Sala concluyó que el despido se sustenta en una falta muy grave de transgresión de la buena fe contractual y abuso de confianza.
El caso se originó cuando, en junio de 2023, El Corte Inglés inició una investigación interna a raíz de una denuncia anónima a través de su canal ético. En ella, se alegaba que Desiderio, quien cobraba 108.403,53 euros al año y desempeñaba funciones de técnico y responsable de la Central de Compras Indirectas del grupo El Corte Inglés, podría estar involucrado en prácticas comerciales irregulares mediante su empresa 2MP y atribuida a facturaciones duplicadas y a sobrecostes para el grupo empresarial, sin que la compañía lo autorizara. Esta compañía, fundada y dirigida por él, tenía una relación comercial con la empresa a través de la intermediación de servicios de retoque fotográfico realizados por Hitech, una empresa con sede en la India. Según los hechos probados, la trabajadora utilizó su posición dentro de El Corte Inglés para justificar la contratación de servicios a través de la sociedad 2MP.
Tras la investigación interna se verificó que los servicios subcontratados por El Corte Inglés a la firma Hitech Digital Solutions LLP, ubicada en India, eran facturados inicialmente a 2MP, que, a su vez, los cobraba a El Corte Inglés con una tarifa incrementada en un 124%.
Además, se constató que este hombre percibía comisiones por parte de Encodify, una empresa que presta servicios informáticos a El Corte Inglés, a cambio de labores como “promover activamente” a dicha compañía en la organización y actuar en su interés. Según se documenta en el fallo, Encodify abonó aproximadamente el 13% de sus ingresos obtenidos de El Corte Inglés directamente a 2MP, generando un beneficio superior a los 993.000 euros entre 2019 y 2023.
Transgresión de la buena fe contractual y abuso de confianza
La sentencia también valida la investigación llevada a cabo por el departamento de cumplimiento normativo de la empresa. El Corte Inglés accedió al correo corporativo del demandante, lo que permitió encontrar evidencias de las prácticas descritas. En el análisis jurídico, se concluye que la utilización de una compañía de titularidad propia como intermediaria para beneficiarse de los servicios contratados representa una violación grave de la buena fe contractual.
El tribunal recordó que “los trabajadores en puestos de confianza tienen obligaciones más rigurosas de buena fe, fidelidad y lealtad”, y destacó que el proceder del demandante comprometió la relación de confianza con la empresa. La sentencia cierra el caso subrayando que la conducta del demandante constituye un perjuicio para su empleador, tanto económico como reputacional. Según el tribunal, “el actor se prevalió de su posición en la compañía para generar una relación triangular en la prestación del servicio, interponiendo una compañía de su exclusiva titularidad y al margen de la normativa interna”.