Los médicos se han ganado la fama de tener una mala caligrafía. Ostentan el honor de tener una de las profesiones más respetadas, gracias a su implicación directa en salvar la vida o ayudar a muchas personas. Esto también hace muy difícil alcanzar este trabajo, pues está muy solicitado, las notas de corte son muy elevadas y el proceso es largo y laborioso.
Sin embargo, siempre ha existido esta crítica a su forma de escribir. Por supuesto, es una generalización, ya que existen médicos con una letra legible y excelente. Pero la realidad es que, según algunos expertos, no solo hay un rumor o una mala fama detrás de esta idea. Podría ser un error más que justificado.
La cirujana Inés Moreno Sánchez (@traumatologageek en TikTok) ha explicado en uno de sus vídeos cuáles podrían ser los motivos detrás de esta costumbre que arrastran muchos médicos. Cuenta con cerca de 50.000 seguidores en su cuenta, y este vídeo ha superado las 445.000 visualizaciones.
“No es una prioridad”
A lo largo del minuto y medio que dura el vídeo expone diferentes condicionantes que provocan que la letra de los médicos parezca un “jeroglífico egipcio”. Para empezar, el volumen de trabajo hace que escriban muy deprisa. En muchas ocasiones, no es tanto la falta de capacidad para escribir bien, como la necesidad de hacerlo de forma veloz. “Escribimos cientos de notas al día”, explica Inés.
El segundo motivo que señala es la dificultad del vocabulario que utilizan. “La medicina está llena de términos complejos y abreviaturas”, comienza argumentando. Los nombres de medicamentos o las lesiones o enfermedades a tratar se complican muchas veces a la hora de redactarlos. Además, son términos desconocidos para la mayoría de pacientes, lo que también dificulta su lectura.
El trabajo continuo y con turnos muy extensos provoca problemas en la “sensibilidad motora fina”. Algunos médicos pueden trabajar 24 horas seguidas o encontrarse con largas guardias. Esto tiene como efecto la pérdida de capacidad de actividades como escribir. También asegura que “después de ver a cientos de pacientes, escribir como un calígrafo no se convierte en una prioridad”.
El problema de la mala letra
No obstante, Inés Moreno no niega que la letra difícilmente legible puede acarrear graves problemas. Afirma que la principal consecuencia negativa que puede suponer es que se produzcan “errores médicos por recetas mal escritas”. Esto puede suponer una situación de riesgo para el paciente, pues provoca que no reciba la medicación o tratamiento correspondiente.
En muchos países ya han tomado medidas para evitar esta situación, obligando a los médicos a redactar las recetas electrónicamente. De esta forma, se esquiva este obstáculo y no es necesario descifrar algunos escritos de los médicos que parecen “códigos secretos”.
Esta cirujana recuerda a sus seguidores estos motivos humanos que hay detrás de la letra ilegible de algunos profesionales sanitarios. Pide que si te encuentras con esta situación, des “un poco de amor a tu médico” y comprendas que seguramente ha tenido que “escribir muy rápido términos endiablados”. La mayoría de usuarios que comentan el vídeo coinciden en apostar por la vía impresa como solución.
