El resquicio legal que permite tener la doble nacionalidad española rumana

Según la normativa española, cualquier ciudadano que adquiera la nacionalidad española debe renunciar expresamente a su nacionalidad de origen, salvo en los casos en los que exista un convenio de doble nacionalidad

Guardar
La protesta en Bucarest, Rumania,
La protesta en Bucarest, Rumania, el 1 de marzo del 2025. (AP foto/Vadim Ghirda)

La posibilidad de que un ciudadano rumano pueda conservar su nacionalidad al adquirir la española es una cuestión compleja que depende de las legislaciones de ambos países. En la actualidad, España solo reconoce la doble nacionalidad con países iberoamericanos, Andorra, Filipinas, Guinea Ecuatorial, Portugal y Francia, lo que excluye a Rumanía de este acuerdo. Sin embargo, la legislación rumana permite que sus ciudadanos mantengan su nacionalidad al adquirir otra, lo que crea una situación ambigua para quienes desean obtener la ciudadanía española sin renunciar a la rumana.

Según la normativa española, cualquier ciudadano que adquiera la nacionalidad española debe renunciar expresamente a su nacionalidad de origen, salvo en los casos en los que exista un convenio de doble nacionalidad. No obstante, la Ley de Ciudadanía Rumana (Ley n.º 21/1991), establece que los ciudadanos rumanos que obtienen otra nacionalidad no están obligados a renunciar a la suya. Además, esta legislación también permite a quienes perdieron la nacionalidad rumana recuperarla sin necesidad de renunciar a la nacionalidad adquirida.

Según el artículo 10, párrafo 1, las personas que han perdido la ciudadanía rumana pueden recuperarla sin necesidad de renunciar a su nacionalidad actual, y lo mismo aplica a sus descendientes hasta el segundo grado. El artículo 11 amplía este derecho a aquellos que perdieron la ciudadanía por motivos ajenos a su voluntad, permitiendo que la recuperen con posibilidad de mantener su ciudadanía extranjera.

Sin embargo, en caso de ser detectado por las autoridades españolas, esta práctica podría ser considerada un fraude de ley y dar lugar a la revisión de la concesión de la nacionalidad española.

El Gobierno da el visto bueno a la nacionalidad española de Ilia Topuria (Europa Press)

A pesar de la falta de un convenio formal, en los últimos años ha habido avances en las negociaciones entre España y Rumanía para permitir la doble nacionalidad de manera oficial. En julio de 2024, el primer ministro rumano, Marcel Ciolacu, anunció que los ciudadanos rumanos residentes en España podrían obtener la doble nacionalidad antes de final de año, aunque esta promesa aún no se ha materializado. “En las conversaciones de Bucarest con el presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, hemos armonizado las negociaciones sobre esta importante cuestión”, señaló en Facebook Ciolacu.

Las negociaciones han continuado, y fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores de España confirmaron el pasado mes de febrero a Infobae España que se han intercambiado borradores de un posible acuerdo. En caso de aprobarse, esta medida beneficiaría a los más de 620.000 rumanos que residen en España, según el último censo anual de la población del INE correspondiente a 2024, permitiéndoles mantener ambas nacionalidades sin riesgo de perder la ciudadanía española.

El dilema de los ciudadanos rumanos en España

Para muchos ciudadanos rumanos, la posibilidad de acceder a la nacionalidad española sin renunciar a la suya de origen es una cuestión relevante. Vlad Virgil Cocinschi, enfermero residente en Vinaròs (Castellón) desde 2002, explica que no ha solicitado la nacionalidad española porque implicaría perder la rumana. “No me ha supuesto un problema para vivir en España porque Rumanía es un país de la UE, pero si mi futuro está aquí, más tarde o temprano tendré que hacerlo”, afirma.

Algunos compatriotas recurren a estrategias para evitar la pérdida de su nacionalidad. Según Cocinschi, muchos ciudadanos rumanos que adquieren la nacionalidad española nunca completan el proceso de renuncia a la nacionalidad rumana, lo que les permite seguir teniéndola a efectos prácticos. No obstante, si las autoridades españolas detectan esta situación, pueden retirar la nacionalidad española por incumplimiento de la normativa.