Lucas, de Andy y Lucas, se encuentra atravesando uno de los momentos más delicados de su vida. El cantante ha tenido que armarse de valor para dar el último adiós a su hermano mayor, Pedro González, quien ha fallecido este martes, 4 de febrero, a los 55 años, a causa de un infarto fulminante.
La amarga noticia ha causado una gran conmoción entre sus familiares y amigos, pues su pérdida ha dejado una huella imborrable en su entorno. Y es que, según informa El portal de Cádiz, Pedro era una persona muy querida y admirada, tanto que era considerado una figura emblemática de La Laguna de Cádiz, donde residía. “Era habitual verlo pasear por la zona y conversar con quienes lo conocían. Tenía un carácter amable y cercano”, asegura el medio local.
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La vida del hermano mayor de Lucas no fue nada fácil. En 1995, sufrió un accidente de tráfico en el que fue atropellado cuando regresaba a casa del trabajo. Aquel desafortunado incidente le llevó a estar en coma durante 45 días. Los médicos tuvieron que someterle a una traqueotomía y quedó con un 76% de discapacidad y grandes problemas de movilidad. Sin embargo, el amor y el apoyo que siempre le ha brindado su familia le ayudó a superar este duro bache.
Dos duras pérdidas en seis años
Hace unos años, Lucas González se abrió en canal y habló largo y tendido sobre su familia, reconociendo que su madre era una heroína que había luchado durante toda su vida para sacarles adelante. En su paso por Volverte a ver reveló que fue su hermano Pedro quien le regaló su primer cajón flamenco, un instrumento que él cambió por una guitarra. Por aquel entonces, desconocía que su destino estaba intrínsecamente ligado a la música, ni mucho menos que triunfaría en ella.
“Mi hermano Pedro es muy especial y que mis padres no se preocupen porque si algún día faltan aquí va a estar su hermano Lucas para cuidarle”, afirmó el cantante gaditano en el espacio de Telecinco. Sin ocultar la delicada situación de su hermano, Lucas siempre ha puesto en valor el trabajo que Pedro en la asociación a la que iba.
“Si no fuera por esa asociación, no sé qué sería de mi madre porque mi hermano entra por la mañana y sale por la tarde”, detalló en el formato de Mediaset, añadiendo que, en una ocasión, acudieron tanto él como Andy a visitarle.
Ahora, la familia ha unido sus fuerzas para despedir a Pedro, quien ha partido de este mundo seis años después de la muerte de su progenitor, también llamado Pedro. Fue en el año 2019 cuando el padre de Lucas falleció debido a un problema en el riñón con el que llevaba varios años luchando.
“Mi padre era mi ídolo y a Andy lo quería como un hijo. He tenido la fortuna de tener un buen hombre como padre, porque quien no es buen padre nunca será un auténtico hombre. Te echaré de menos. Ningún ser humano está preparado para perder un padre que ha sido tan bueno“, aseguró entonces el artista.
