
En los últimos seis meses, un 54,1% de los españoles ha realizado alguna compra online, según un reciente informe publicado por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia. Amazon es la empresa más utilizada, pero otras como AliExpress, Shein o Vinted se han convertido en frecuentes formas que tienen los consumidores de hacerse con todo tipo de productos.
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Sin embargo, el componente online no impide que sigan existiendo trabajadores que, día a día, hacen que este tipo de comercio se lleve a cabo con el mayor rendimiento posible. En este sentido, uno de los sectores más importantes es el de los mensajeros de paquetería. Un colectivo de trabajadores que, además, ha aparecido numerosas veces en los medios por las malas condiciones de trabajo a las que se pueden ver sometidas.
Dar 25.000 pasos cada día u orinar en bolsas
Las condiciones en las que trabajan los repartidores de estas grandes empresas, generalmente empleados en otras empresas contratadas, han sido denunciadas en muchos países. Sus historias han trascendido gracias a reportajes en prensa o confesiones en redes sociales, pasando por películas con una gran repercusión como Sorry We Missed You, del cineasta británico Ken Loach.
En esta ocasión, ha sido el medio italiano fanpage.it el que ha aportado un nuevo testimonio, después de acompañar durante una jornada laboral a uno de esos profesionales de la mensajería. Una jornada en la que realizaron aproximadamente un total de 90 paradas y se condujo por toda la ciudad de Milán para repartir todo tipo de sobres y paquetes.
“Doy 25.000 pasos al día, es gimnasia todos los días”, afirma el repartidor en este reportaje. El tiempo estimado es de una entrega cada cinco minutos". Explica, de hecho, que la presión a la que se ven sometidos respecto al tiempo que deben tardar en hacer la próxima entrega, hace que incluso algunos de sus compañeros hayan “orinado en bolsas”.
Un negocio de dar más por menos
Y es que, en un mercado en el que cada vez se piden más cosas a través de Internet y que, además, cada vez se esperan repartos más inmediatos, el sector no parece haber reformado con eficacia las políticas empresariales, “a costa de la salud física, psíquica y social de las personas que trabajan con horarios tan agotadores y en condiciones bastante precarias”, tal y como el sindicato de UGT señalaba en un monográfico de Prevención de Riesgos Laborales en el sector mensajería (transporte de mercancías por carretera).
Desde fanpage.it apuntan a que esto se debe a que el hecho de que las grandes empresas contraten a otras entidades empresariales para que se encarguen del reparto fomentan un empobrecimiento de las condiciones de trabajo de los repartidores. “Cuando se sacan licitaciones, se hace con la intención de bajar los costes”, señala Illir Koxha, miembro del sindicato Cobas en Italia.
Las empresas que pretenden hacerse con esas licitaciones compiten entre sí para ofrecer precios cada vez más bajos que les hagan lograr el mayor número de contrataciones posibles. “Con el contrato se externalizan responsabilidades y derechos, cuesta menos”. Es por eso, que desde las diferentes administraciones es cada vez más habitual ver cómo se presiona a las empresas de comercio electrónico para que internalicen a todos estos trabajadores. “Este proceso debe completarse”, concluye Koxha.