
Acudir a una cena o reunión en casa de amigos o familiares suele ir acompañado de la costumbre de llevar un obsequio para los anfitriones. Durante años, las botellas de vino y los ramos de flores han sido las opciones más elegidas, pero cada vez más personas buscan alternativas más originales y prácticas. ¿Cuál es, entonces, el mejor regalo para estas ocasiones?
Los expertos en etiqueta y protocolo coinciden en que el vino y las flores pueden generar ciertos inconvenientes. Por un lado, una botella de alcohol puede quedarse olvidada en un rincón o no combinar con el menú elegido para la velada. Además, el anfitrión puede sentirse obligado a abrirla en el momento, generando un dilema innecesario.
En el caso de las flores, el regalo se convierte en una tarea extra, ya que quien las recibe debe buscar un jarrón, cortarlas y acomodarlas mientras atiende a los invitados. También se suma el problema de las alergias al polen, cada vez más comunes. Según Linternaute, una mejor opción es regalar productos gastronómicos que los anfitriones puedan disfrutar a su ritmo.
Bombones, aceite de oliva o café, entre las mejores opciones
Entre las sugerencias más recomendadas se encuentran los alimentos gourmet, como una buena selección de bombones de calidad, aceite de oliva premium, café especial o incluso caramelos salados. Estos obsequios permiten que los anfitriones los consuman cuando prefieran, sin la presión de servirlos en el momento. También destacan productos como frutos secos, miel o sales y vinagres de origen especial, que pueden sorprender sin resultar invasivos.
Geneviève d’Angenstein, experta en buenos modales y fundadora de una escuela de etiqueta, subraya que la clave está en la calidad más que en la cantidad. “Es mejor una pequeña caja de chocolates selectos que una gran cantidad de dulces mediocres”, ha explicado en declaraciones a Madame Figaro.

Otro aspecto a considerar es la relación con los anfitriones. Los especialistas en protocolo recomiendan evitar regalos demasiado personales, como ropa o perfumes, especialmente si hay otros invitados presentes. “Los obsequios demasiado íntimos pueden generar incomodidad en un ambiente social”, ha señalado Geneviève d’Angenstein.
Al final, elegir el mejor regalo para llevar a una casa no solo implica originalidad, sino también considerar la comodidad del anfitrión. Optar por un detalle gastronómico de calidad es una alternativa práctica y apreciada, que permite disfrutarlo sin presiones y evita situaciones incómodas durante la reunión.
Regalos más allá de la gastronomía
Si bien los productos gourmet son una opción segura, existen muchas otras alternativas que pueden sorprender. Según Abrasador en Casa, los obsequios para el hogar son una excelente manera de ofrecer algo duradero y funcional. Velas aromáticas, plantas de interior o marcos de fotos pueden ser detalles elegantes y fáciles de integrar en cualquier espacio. También se pueden considerar sets de baño de alta calidad, cojines decorativos o libros sobre temas de interés para los anfitriones.
Otra opción interesante son los juegos de mesa o los artículos de entretenimiento, especialmente para reuniones con grupos grandes. Clásicos como el Scrabble o el Monopoly son siempre una apuesta segura, mientras que juegos más modernos como el Cards Against Humanity o Exploding Kittens pueden animar la velada con un toque de humor. Para los amantes de la música o el cine, un vinilo de edición especial o un libro sobre su banda o género favorito pueden ser regalos memorables.