
En menos de nueve meses, los vehículos matriculados en España deberán portar una luz V-16 para aumentar la seguridad en caso de incidente en la vía. Esta nueva medida, que entrará en vigor el 1 de enero de 2026, ha generado muchas dudas entre los conductores, quienes se preguntan cuáles vehículos estarán obligados a llevar esta luz y cuáles no.
La obligatoriedad de las luces V-16 está contenida en el Real Decreto 159/2021 del 16 de marzo de 2021, que regula los servicios de auxilio en las vías públicas. En su disposición final segunda, se modifica la señal V-16 del anexo XI del Reglamento General de Vehículos, que consiste en un dispositivo luminoso de preseñalización de peligro. Este cambio tiene como objetivo principal reducir la cifra de atropellos que ocurren cuando, tras un incidente en la carretera, el conductor debe caminar por el arcén para colocar el tradicional triángulo de seguridad.
La luz V-16 conectada permite que el conductor de un vehículo inmovilizado sea visible no solo de forma física, sino también virtualmente a otros usuarios de la vía, lo que aumenta la seguridad al evitar accidentes adicionales. Este dispositivo tiene la ventaja de que se coloca rápidamente y sin que el conductor deba salir del vehículo, lo cual minimiza el riesgo de atropellos.
De acuerdo con la normativa, solo ciertos tipos de vehículos estarán obligados a equipar la luz V-16. Los vehículos que deben contar con este dispositivo a partir de 2026 son los siguientes:
- Turismos: Incluye coches de particulares y vehículos destinados al transporte de personas.
- Vehículos mixtos: Aquellos que combinan el transporte de personas y mercancías.
- Autobuses: Todos los autobuses deberán estar equipados con la luz V-16 para garantizar la visibilidad en caso de incidentes.
- Automóviles destinados al transporte de mercancías: Camiones y vehículos de transporte comercial también deberán llevar la luz de emergencia V-16.
¿Y las motocicletas?
Aunque las motocicletas no estarán obligadas a llevar luces V-16 en 2026, su uso sigue siendo muy recomendable. Los vehículos de dos ruedas no cuentan con el espacio necesario para colocar el triángulo de seguridad, por lo que la luz V-16 se presenta como una opción mucho más práctica y segura.
“El hacerse visible a los demás usuarios de la vía, tanto de forma física como virtual, es especialmente crucial para los motoristas. En caso de un incidente, no tienen un habitáculo en el que resguardarse, lo que aumenta el riesgo de atropellos. Por eso, lo ideal es que todos los conductores, incluidos los de motocicletas, dispongan de una señal de emergencia V-16 conectada”, explica Alejandro González, CMO de Netun Solutions, empresa dedicada a la seguridad vial.
Por su parte, las autocaravanas están sujetas a una regulación especial. Según la Dirección General de Tráfico (DGT), las autocaravanas deberán llevar obligatoriamente una luz V-16 desde la fecha de entrada en vigor de la normativa, independientemente de los plazos aplicados a otros vehículos. Esta medida busca garantizar que los usuarios de autocaravanas, que a menudo se encuentran en carreteras secundarias o en zonas menos transitadas, cuenten con una señal de emergencia eficaz.
La normativa también especifica que existen modelos de luces V-16 con base imantada que permiten su colocación en superficies metálicas no horizontales, una característica especialmente útil para vehículos altos como las autocaravanas. También hay modelos con ventosas u otros sistemas de fijación, lo que facilita su uso en superficies no metálicas.
El principal objetivo de la luz V-16 es mejorar la seguridad vial. Durante años, el triángulo de emergencia fue la herramienta estándar para señalizar un incidente en la carretera. Sin embargo, su colocación implica que el conductor abandone su vehículo, lo que representa un riesgo significativo, especialmente en carreteras con tráfico rápido. En cambio, la luz V-16 permite que el conductor se haga visible sin salir del vehículo, reduciendo el riesgo de atropellos.