Qué es el trastorno de referencia olfativa, el síndrome por el que muchas personas creen oler mal aunque no lo hagan

Las causas de este síndrome responden a varios factores psicológicos y sociales

Guardar
Un hombre preocupado por su
Un hombre preocupado por su olor corporal (AdobeStock)

A todos nos preocupa oler mal (o, al menos, debería). Pero hay a quienes les angustia en exceso, hasta el punto de suponer un síndrome. El trastorno de referencia olfativa es una condición psiquiátrica que, a pesar de ser poco común, puede empeorar significativamente la calidad de vida de una persona al dañar su percepción del olfato de una persona.

Según los Manuales MSD, este trastorno se caracteriza por una preocupación excesiva e irracional sobre el propio olor corporal, a menudo acompañada por la creencia errónea de que uno emite olores desagradables. Aunque no es tan ampliamente conocido como otros trastornos psiquiátricos, su impacto en la calidad de vida de los individuos puede ser profundo.

Para entender mejor el trastorno de referencia olfativa, es crucial explorar tanto sus síntomas como sus posibles causas y tratamientos. Las personas que sufren de este trastorno pueden experimentar una variedad de síntomas que incluyen la constante preocupación por su olor corporal, la evitación de interacciones sociales debido al temor a ser percibidos como apestosos, y la búsqueda compulsiva de confirmación o rechazo de la presencia de un olor desagradable.

Las causas subyacentes del trastorno de referencia olfativa no están completamente claras, pero se considera que factores psicológicos y sociales desempeñan un papel crucial. Por ejemplo, algunas experiencias traumáticas pasadas, como el acoso o la vergüenza relacionada con el olor corporal, podrían contribuir al desarrollo de este trastorno. Además, condiciones psiquiátricas como la ansiedad y la depresión pueden estar presentes en quienes padecen este síndrome, aunque la relación exacta entre estas condiciones aún se está investigando.

Desde el punto de vista del diagnóstico y tratamiento, es fundamental que los profesionales de la salud mental y los especialistas en olfato realicen una evaluación exhaustiva. Esto puede incluir entrevistas clínicas para comprender la historia y los síntomas del paciente, así como pruebas específicas para evaluar la función olfativa real y la percepción subjetiva del olor.

¿Es posible tratar este síndrome?

En términos de tratamiento, las opciones terapéuticas suelen ser multifacéticas. La terapia cognitivo-conductual (TCC) ha demostrado ser efectiva al ayudar a los individuos a desafiar y cambiar sus creencias distorsionadas sobre el olor corporal. Además, la terapia farmacológica, como el uso de antidepresivos o ansiolíticos bajo supervisión médica, puede ser beneficiosa para aquellos que experimentan síntomas severos de ansiedad o depresión relacionados con su percepción del olfato.

La educación y el apoyo psicosocial también son componentes críticos del tratamiento. Los grupos de apoyo pueden proporcionar un espacio seguro para que los individuos compartan sus experiencias y se sientan comprendidos, reduciendo así el aislamiento social y fomentando la recuperación.

Es importante destacar que el trastorno de referencia olfativa no debe ser subestimado ni ignorado. Aunque puede no ser tan visible como otros trastornos psiquiátricos más conocidos, como la depresión o la ansiedad generalizada, tiene un impacto significativo en la vida diaria y la autoestima de quienes lo experimentan. La concienciación pública y la educación sobre este síndrome son fundamentales para promover una comprensión empática y reducir el estigma asociado.