
Fue el presidente de Ucrania —devenido ahora en “dictador”, según Donald Trump—, quien ha vuelto a poner el tema sobre la mesa. “Ha llegado el momento de crear las Fuerzas Armadas de Europa; os insto a actuar por vuestro propio bien”, proclamó Volodímir Zelenski días atrás, en Múnich, ante un auditorio repleto de ministros, diplomáticos y militares de todo el mundo, muchos de ellos europeos. Las palabras del ucraniano, pronunciadas horas después de que Bruselas constatase que a Estados Unidos ya no le interesa la defensa del continente, ha revitalizado un viejo debate: ¿Precisa la UE su propio ejército? Los expertos consultados por Infobae España no lo ven posible.
“¿Qué significa tener un ejército europeo?”, se pregunta el eurodiputado español Antonio López-Istúriz. “Si lo que queremos decir es que mejoraremos nuestra coordinación y aumentaremos nuestras capacidades, seguro; pero si supone que un ente supranacional como la UE será quien tenga la capacidad de reclutar personal militar propio, eso no es tan sencillo. La Defensa es la columna vertebral de la soberanía de un país, y son los Estados miembro quienes la gestionan”, afirma el parlamentario del Partido Popular en Bruselas.
En la misma línea se muestra el consultor independiente en temas de defensa Carlos Delgado, quien asegura que “la creación de unas Fuerzas Armadas Europeas es inviable”, justamente porque el tema de la soberanía nacional es “una traba importante”. “Europa no es un país y no existe ningún organismo internacional que tenga un ejército, ni siquiera la OTAN, dado que en ella confluyen las tropas y el armamento de los miembros de la Alianza”, señala. ”Además, ¿hasta qué punto un ciudadano danés, por ejemplo, tiene interiorizado que un soldado de su ejército tiene que ir a morir por defender los intereses de Portugal?”, indaga Delgado.
“Europa no se hizo para esto”, sostiene, por su parte, Jorge Dezcallar, exembajador de España en Estados Unidos. “El objetivo final de la Unión Europea era que no hubiera guerras y hacer un mercado común, una gran zona comercial para época de paz”. Sin embargo, el también exdirector del CNI afirma que es innegable la necesidad de que los países europeos inviertan más en su propia defensa, tal como reclama Trump. “Eso lo sabíamos desde hace años y no lo hemos hecho porque era muy cómodo vivir de gorra sabiendo que los americanos nos pagaban la defensa, y así nosotros podíamos destinar el dinero de defensa a tener mejores carreteras, trenes y sanidad que Estados Unidos”, explica.
López-Istúriz coincide en que “durante décadas” los países de la UE se han “desentendido” de la defensa de su territorio: “Trump no es el primero que nos lo reclama, sino que es una petición reiterada con insistencia desde Washington, y los europeos, acomodados en nuestro Estado del Bienestar, que hemos pagado con los dividendos de la paz, hemos hecho oídos sordos, algunos más que otros”.
¿Qué pasa con la OTAN?
Ante el hecho de que el nuevo ocupante de la Casa Blanca está dispuesto a dejar a su suerte a Europa, no son pocos los que ven debilitada la Alianza Atlántica. “Ya no podemos contar con la OTAN”, apunta Dezcallar. “Trump dice que hay que redefinir sus objetivos y es partidario de una OTAN durmiente donde los Estados Unidos solo intervinieran como última necesidad”.
Delgado también cree que el organismo “peligra”, pero destaca que “irse de la OTAN, aunque sea él el mayor contribuyente, perjudicaría también a Estados Unidos”. Por el momento, el republicano carece de los apoyos de las 2/3 partes del Senado que precisaría para sacar a su país de la Organización. “No creo que la OTAN esté en entredicho”, asegura López-Istúriz. “Está en manos de la UE que revitalicemos la Alianza tomándonosla en serio y reivindiquemos nuestro papel para sentarnos en las mesas de negociación, donde deberíamos estar”.