Además de enfrentarse a largas jornadas laborales y sueldos a veces insuficientes en algunos establecimientos, los camareros también tienen que lidiar en muchas ocasiones con conflictos con los clientes. En la actualidad, los consumidores de los establecimientos tienen al alcance de su mano una herramienta que les permite puntuar, en el momento que deseen, cómo ha sido su experiencia en un restaurante. Esto puede resultar positivo, pues es el propio cliente el que valora la calidad de los productos o el trato, pero también pueden darse situaciones en las que la reputación del establecimiento queda manchada, a veces injustamente.
A través de sus redes sociales, Jesús Soriano, conocido en internet como Soy Camarero, publica las denuncias de los trabajadores de hostelería y también estas reseñas, que pueden recibir la consecuente respuesta del dueño del establecimiento si este no está de acuerdo con lo expresado por los comensales. A partir de estos contenidos, Jesús Soriano abre el debate sobre cuestiones relacionadas con la hostelería, como es el caso de los horarios de los restaurantes.
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En la mayoría de establecimientos existe una hora en la que se cierra la cocina (se dejan de tomar comandas y el personal se dedica a ultimar los preparativos para el cierre) y otra en la que se cierra el local. De esta manera, se da tiempo a los comensales a terminar de comer los platos que ya estaban servidos o finalizar con un postre o un café. En algunas ocasiones, esto genera conflictos entre los trabajadores y los clientes, especialmente cuando los segundos buscan que se les atienda fuera de este horario.
“Era tu obligación”
“Después de dos horas de viaje, llegamos a nuestro hotel mi pareja y yo. Vimos este restaurante justo al lado que parecía un buen sitio para comer”, comienza a explicar el cliente en la reseña. “Nos acercamos para preguntar si podíamos comer y nos rechazaron inmediatamente de la peor manera y formas que se puede tratar a alguien. Eran las 16:30 de la tarde y nos puso de excusa que cerraban a las 17:00. Por educación, nosotros no dijimos nada, pero ¿perdona? Hasta las 17:00 tu obligación como trabajadora era atendernos o, por lo menos, ser un poco más empática y educada con los clientes y hablar bien y civilizadamente. Chica, eres prepotente, no sé si serás la misma a la que critican en las publicaciones, pero la verdad que es de vergüenza tener a alguien de empleado así. Después de esto, no le recomendaría a nadie venir aquí”.
El autor del comentario destaca dos cuestiones: por una parte, la supuesta falta de respeto de la trabajadora, algo que muchos clientes señalan en algunas reseñas que dejan a los establecimientos que visitan; por otra parte, la “obligatoriedad” de que les sirvan si el restaurante cierra a las 17:00, que no es lo mismo que el cierre de la cocina. Por este motivo, el dueño del local decidió dejar una respuesta: “Al igual que todos los negocios, tenemos un horario. El negocio cierra a las cinco para darle tiempo a las familias que están acabando de comer. Pero, para su información, la cocina cierra a las cuatro, por lo cual, ya estaba cerrada cuando llegaron. Un saludo y seguramente usted también tenga un horario que le gusta que le respeten”.
Son varios los usuarios de la red social de TikTok, donde Soy Camarero ha publicado el contenido, que han señalado que son muchos los consumidores que no respetan estos horarios y que se molestan cuando se les indica que ya no pueden comer en el establecimiento: “Trabajo en un hotel y la cena termina a las 22:00 para poder recoger y así irnos a nuestra hora. Siempre están los que llegan 5 minutos antes de cerrar y ya nos vamos media hora tarde. Así siempre”, explica un usuario en los comentarios.
Sin embargo, también hay personas que han señalado que, de ser cierto el mal trato recibido por parte de la camarera, es esta cuestión en la que debería incidirse: “Independiente de todo, si fue un trato malo, no tiene justificación. Se puede decir educadamente que la cocina está cerrada”.
