La Taberna Garibaldi, el bar de Pablo Iglesias, reacciona a las acusaciones de “salarios bajos y turnos abusivos” de sus trabajadores

El bar de Pablo Iglesias, la Taberna Garibaldi, ha desmentido en un comunicado la información del programa La Mirada Crítica de Telecinco que expuso que los trabajadores del local madrileño se rebelaron contra la dirección por “salarios bajos y turnos abusivos” y pide que rectifique.

El pasado lunes, el programa dirigido por la periodista Ana Terradillos, se hizo eco de una noticia de Vozpópuli sobre una supuesta rebelión de los trabajadores del bar por sus condiciones de trabajo precarias. El comunicado del bar hace alusión a una entrevista que la periodista del programa hizo al autor de la noticia, quien afirmó que los trabajadores abrieron una sección sindical en la CNT “después de muchas reclamaciones, sin frutos, a la dirección de la empresa del Sr. Pablo Iglesias”. El entrevistado aseguró que “hay problemas laboral dentro de la empresa”, que se debían principalmente a contratos con ”salarios bajos, de horas extra, y turnos un poco abusivos, las típicas quejas del sector de la hostelería”.

En la carta que ha sido emitida a la corporación mediática Mediaset y difundida en X, el local ha desmentido la existencia de reclamaciones por parte de los trabajadores a la empresa. “En este sentido, es incierto que la constitución de la sección sindical por parte de los trabajadores, que la empresa saluda, responda a quejas inatendidas (sic) por parte de la dirección”, ha añadido. El pasado 7 de febrero, la cuenta oficial de CNT Comarcal Madrid Sur confirmó en una publicación la existencia de una sección sindical en este local, si bien no expuso motivos. Taberna de Garibaldi desmiente también que haya “turnos abusivos o salarios bajos”, ya que afirman que los sueldos se encuentran “por encima del convenio colectivo”.

Con esto, la empresa del exvicepresidente del Gobierno y exlíder de Podemos ha pedido la rectificación “en el plazo establecido por la ley”: “Ante la falsedad y tendenciosidad de la información ofrecida, al amparo del articulado la Ley Orgánica del Derecho de Rectificación de 1984, y reservándonos el derecho de las acciones penales, o civiles de otra naturaleza que pudieran asistirnos como perjudicado por las informaciones difundidas, dirigimos este escrito de rectificación para que sea difundido y rectificado”, puede leerse en el comunicado.

Tras anunciar su inauguración, Iglesias afirmó que el local también sería escenario de encuentros culturales como conciertos en acústico o lecturas de poesía, y lugar también de movilización. Sin embargo, sus inicios fueron complicados. A unas horas de la apertura, la fachada del establecimiento apareció llena de pintadas en las que se pedía la retirada de uno de sus cócteles, el ‘Durruti Dry Martini’, en referencia al sindicalista y revolucionario Buenaventura Durruti, un referente político del anarquismo. Cinco días después del incidente vandálico, un problema técnico volvió a interrumpir el funcionamiento del local.