Este martes, Eva Cárdenas saltaba a los titulares nacionales por una polémica surgida con los terrenos públicos que rodean su hogar en la localidad pontevedresa de Moaña. La mujer del líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, y exdirectora de Zara Home, ha solicitado una concesión de suelo público durante 30 años para tener acceso directo a la playa, según informaba ayer elDiario.es.
Se trata de un espacio en la playa de O Con, que la familia del líder del PP mantiene en disputa con el Servicio Provincial de Costas de Pontevedra. A raíz de un expediente iniciado a comienzos de noviembre, el organismo dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica, publicó en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el pasado 5 de noviembre su intención de recuperar esta porción de terreno que la también fundadora de la inmobiliaria Niebla Azul mantiene a día de hoy dentro de su jardín.
Según detalló elDiario.es, el anuncio otorgaba a las partes afectadas un plazo para presentar alegaciones antes de proceder con la recuperación del espacio. Cárdenas presentó dicha alegación el pasado 20 de noviembre en la que solicitó una concesión administrativa que le permita seguir utilizando una franja de aproximadamente 210 metros cuadrados de terreno público como parte del jardín de su vivienda, ya que este espacio conecta directamente con la playa.
Costas alegó que la medida tenía como fin el cumplimiento de la normativa que regula la protección del litoral, ya que el terreno está delimitado por un muro de bloques y una puerta de acceso que impiden el libre acceso a la playa. Pero, ¿cómo es el hogar que adquirió en 2019 la experta en decoración?
150 metros cuadrados de vivienda
Se trata de una casona de piedra en Tirán, una parroquia de la localidad pontevedresa de Moaña que consta de 150 metros cuadrados. Cuando Cárdenas adquirió la propiedad, Feijóo aún ejercía como presidente de la Xunta de Galicia. La vivienda, una casa de piedra de los años 70 y construida sobre una finca de 700 metros cuadrados, se encuentra en una ubicación privilegiada, con acceso directo al mar, un jardín propio y un espacio destinado al resguardo de embarcaciones durante el invierno, tal y como ya explicaron los medios locales en su momento.
Los planes de renovación de la pareja incluyeron la restauración de la estructura original. La distribución de la casa, según los anuncios inmobiliarios previos a su venta que la datan de 675.000 euros, comprendía un sótano de aproximadamente 20 metros cuadrados, una planta baja con un salón amplio, cocina, dormitorio y aseo, y una planta superior con cinco habitaciones y un baño. En cuanto al jardín, cuenta con plantas ornamentales como camelias y setos de boj.
El punto en disputa es la parcela de 210 metros cuadrados que da acceso directo a la playa. Este espacio, acondicionado como parte del jardín, está separado por un muro del mirador de O Fiunchal, un enclave de acceso público que ha permanecido cerrado por riesgo de derrumbe sobre la arena.