Más de 242.000 personas estaban a finales de 2024 con la solicitud de asilo pendiente en España, un 27% más que en 2023 (191.095), según el informe Más que cifras, elaborado por la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR), que también indica que fueron 167.366 personas las que solicitaron asilo a lo largo del año pasado, “lo que supone un ligero incremento con respecto al año anterior, pese a las previsiones alarmistas”. Además, la organización destaca el aumento de la tasa de reconocimiento con respecto año anterior, del 12% al 18,5%, aunque lamenta que siga siendo inferior a la media europea, que a finales de noviembre era del 40%.
Pese al aumento en el número de solicitudes, CEAR recuerda que miles de personas siguen encontrando enormes obstáculos para acceder al procedimiento. “No solo no se habilitan suficientes vías legales y seguras, sino que el año pasado se introdujeron nuevos visados de tránsito aeroportuarios que afectan a nacionales de hasta seis países (Sudán, Chad, Mauritania, Egipto, Senegal y Kenya), medidas que impedirán a muchas personas necesitadas de protección internacional solicitar asilo en España, sin tener que jugarse la vida en el intento”, denuncia la organización.
CEAR señala que las resoluciones negativas también continuaron aumentando hasta alcanzar casi el 43%. Esto se debe principalmente, explican, a las denegaciones que reciben la gran mayoría de personas de Colombia año tras año, “pese a la situación de amenaza constante que siguen sufriendo en este país”, donde las masacres se han incrementado en este último tiempo y han crecido los grupos armados pese al avance en las negociaciones de paz y de un mayor enfoque en derechos humanos en las políticas del Gobierno. Por otro lado, el aumento de resoluciones favorables se explica por el incremento exponencial de la protección subsidiaria, añade CEAR, que crece casi un 200% respecto a 2023 especialmente por las personas procedentes de Mali. Sin embargo, la organización considera preocupante que las concesiones de estatuto de refugiado decrezcan más de un 13%.
Venezuela y Colombia a la cabeza
El informe de CEAR también indica que las peticiones de asilo fueron tan solo un 2,5% superior a las registradas en 2023, muy inferior al aumento del 37% del periodo anterior. A estas hay que sumar las 36.704 solicitudes de protección temporal de personas de Ucrania, lo que eleva la cifra a 231.699 personas ucranianas con este tipo de protección en España desde que comenzó la invasión rusa hace justo tres años.
Seis de las diez principales nacionalidades de las personas solicitantes en 2024 proceden de América Latina, “región marcada por la inestabilidad política, los abusos de derechos humanos en el marco de la lucha contra el narcotráfico y la acción de grupos armados no estatales”. Las cuatro nacionalidades restantes proceden del norte de África y África occidental, asoladas por conflictos armados prolongados, crisis políticas y los efectos de la crisis climática.
Así, Venezuela y Colombia se mantienen como las dos primeras nacionalidades de personas solicitantes de asilo en España, con 66.134 y 40.140 solicitudes respectivamente, acumulando más del 63% del total de solicitudes. Mientras tanto, Mali desplaza a Perú como tercer país de origen, con un total de 10.673 solicitudes. Completan el listado de las diez principales nacionalidades Perú, Senegal, Marruecos, Nicaragua, Honduras, Mauritania y Ecuador.
Mali representa la principal novedad respecto de 2023, con un incremento del 700 % en el número de solicitudes presentadas. El país africano se enfrenta a una crisis humanitaria compleja que se prolonga desde 2012, en la que se combinan factores como la amenaza yihadista que no deja de propagarse a través del país, la inestabilidad política tras el golpe de Estado sufrido en 2020, factores de vulnerabilidad estructurales, desafíos socioeconómicos y los efectos de la crisis climática.
Aumento de solicitantes de asilo de Senegal
Por otra parte, CEAR también destaca en su informe el aumento de solicitantes de asilo de Senegal, por la combinación de factores como la crisis política sufrida en 2023, así como los efectos cada vez más evidentes de la crisis climática. También se incrementan las peticiones de nacionales de Mauritania, país fronterizo con Mali y Senegal, y bisagra entre el África occidental y la región del Magreb.
Por otro lado, el informe señala que han descendido las resoluciones por razones humanitarias, menos garantistas que la protección internacional, aunque siguen representando el 37% del total de resoluciones en 2024 (33.535), frente al 47% en 2023 (41.487). Venezuela sigue concentrando el 97,8% de este tipo de resoluciones (32.786).