El truco del tenedor para que los cristales de la ventana brillen: elimina la suciedad de todos los rincones

Este remedio permite llegar a las zonas difíciles para eliminar las marcas, la suciedad y el polvo y dejar las ventanas relucientes

Guardar

La limpieza de la casa es necesaria en la rutina y en la vida diaria. El cuidado y estima que se le tiene a un hogar es también el reflejo de la personalidad de alguien. Si al entrar a una casa ajena se observa mucha suciedad en el suelo, desorden y muchas cosas por medio, es lógico que esto provoque incomodidad e inquietud. Sin embargo, si la casa está limpia y ordenada, habrá un ambiente armónico y cómodo.

Por tanto, las tareas del hogar no son simplemente un asunto importante de cara a la higiene y a la limpieza, sino también una cuestión de respeto por las personas que puedan visitar la casa e, incluso, un deber con la armonía y la sintonía en el hogar. Una casa limpia es una casa más cómoda y confortable.

Es cierto que cada vez el ritmo de vida es más acelerado y, quizá, esto lleva a subestimar aspectos de la calidad de vida como puede ser el tener una casa bien limpia y decente. De igual manera, puede creerse que, para salir del paso, basta con barrer un poco el suelo y adecentar los baños para tener la casa limpia, y a veces se olvida el cuidado de elementos de la casa como el sofá, los muebles o, en este caso, las ventanas.

El truco del tenedor

Las ventanas son un elemento muy necesario en el hogar. Más allá de la ventilación y el saneamiento del aire, una ventana es sinónimo de luz y, sin duda, uno de los factores que se buscan cuando elegimos un hogar para vivir es la luminosidad. Por ello, de nada sirve que la casa sea luminosa si no mantenemos los cristales limpios ya que, aparte de denotar poco cuidado, es muy antiestético y no cuesta ningún esfuerzo.

Descubre un truco que te
Descubre un truco que te ayudará a tener los cristales de tu casa impecables. (Foto: Freepik)

Cierto es que, en ocasiones, la suciedad y el polvo se acumulan en rincones del cristal a los que es más complicado acceder. Esto se debe a que las ventanas están bastante expuestas a estos agentes y, por ejemplo, un día de viento o de lluvia puede fastidiar la limpieza de los cristales. Es por eso que se debe mantener el cuidado de las ventanas y limpiarlas por dentro y por fuera. Para facilitar esta tarea y llegar a todos los rincones del cristal, donde se acumula la suciedad, podemos utilizar el truco del tenedor.

Para conseguir eliminar toda la suciedad, hasta de los rincones más difíciles, solo hay que envolver una esponja entre los dientes del tenedor. Así, podrás raspar toda la suciedad y limpiar el cristal entero sin riesgo de dañarlo ni rallarlo.

Productos para las ventanas y otros trucos

En el caso de las ventanas correderas, estas se abren lateralmente y quedan fijas de forma vertical. De esta forma, al abrirlas o cerrarlas, las ventanas circulan por un riel que, con el tiempo, se convierte en un vertedero de suciedad y polvo. Para limpiar esta zona tan correosa, otro truco es hacer unas marcas en el estropajo que coincidan con las marcas del riel. Luego cortar el estropajo por las marcas y utilizarlo con el producto. De esta forma, el estropajo se adapta a la forma del riel y se podrá llegar a todas las zonas en las que hay suciedad.

En todo caso, se recomienda utilizar los productos adecuados para limpiar los cristales, ya que no utilizar un buen producto de limpieza puede afectar a la vida útil de la ventana. Para esto, es mejor huir de los productos químicos agresivos y utilizar mezclas hechas en casa. Para limpiar los cristales, una de las mejores soluciones es agua caliente, con unas gotas de detergente o lavavajillas y un buen chorro de vinagre de limpieza.

Guardar