La Junta de Andalucía ha activado el plan de emergencia ante el riesgo de inundaciones en la comunidad, en su fase de preemergencia, por las fuertes lluvias que se están produciendo y que se esperan a lo largo de la jornada. El consejero de la Presidencia, Antonio Sanz, ha activado este plan, en situación operativa 0, según ha informado Emergencias 112, que ha pedido extremar la precaución y seguir los consejos de los expertos.
La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha activado la alerta amarilla y naranja en las comarcas malagueñas de Sol y Guadalhorce, que se encuentran en aviso hasta las nueve de la noche por precipitaciones que pueden alcanzar los 50 litros en una hora y 110 litros por metro cuadrado en doce horas y pueden ir alcanzadas de granizo pequeño. De hecho, las lluvias registradas en las últimas horas en la provincia de Málaga han dejado más de 80 litros por metro cuadrado en puntos del litoral como Torremolinos y han causado 75 incidencias en la franja comprendida entre esa localidad y la de Fuengirola. Ante este escenario, el Ayuntamiento de Torremolinos ha activado el comité de emergencias y ha decidido recomendar que el alumnado no asista a clase esta jornada.
El portavoz de la AEMET, Rubén del Campo, espera que continúen los chubascos tormentosos y añade que podría nevar en los sistemas béticos de Andalucía, a partir de unos 1.200 metros de altitud. De hecho, también ha estado activo el aviso amarillo por nevadas en Granada, mientras que en el resto del país los cielos se mantienen despejados.
Bajada en los termómetros
“El martes será una jornada de tiempo tranquilo en toda España”, adelanta del Campo, que descarta que se vean las mismas lluvias que se están registrando este lunes en el sur del país. Los termómetros bajarán y habrá heladas en buena parte del interior del norte y este de la península ”con registros de entre dos y cuatro grados bajo cero en ciudades de la meseta norte o del interior oriental”. No obstante, por el día se superarán los 10 a 15 grados e incluso se rondarán los 18 grados en puntos del Mediterráneo.
El miércoles será un día similar al anterior: cielos poco nubosos, ausencia de lluvias, bancos de niebla matinales y heladas nocturnas. De este modo, en el interior del norte y del este, se esperan valores mínimos de entre dos y cuatro grados bajo cero, un escenario que se repetirá el jueves.
El viernes “vientos muy fríos” procedentes del interior del continente europeo provocarán un descenso de las temperaturas al arrastrar una masa de aire frío. “La bajada de temperaturas se notaría sobre todo en los valores diurnos y en la mitad norte peninsular, mientras que el fin de semana esta bajada térmica se extendería a buena parte del territorio y también bajarían las temperaturas nocturnas”, señala del Campo. Con este cambio, las heladas serán más extensas y afectarán a más zonas en puntos de la meseta norte, páramos del centro y zonas de montaña. “No se alcanzarían más de ocho grados en amplias zonas del norte y centro del territorio”, advierte del meteorólogo.