El rostro de Ismael Beiro empezó a cobrar una gran fama tras participar en la primera edición de Gran Hermano, donde logró hacerse con el título de ganador. La simpatía y la naturalidad de la que hacía alarde en el reality de Telecinco, le facilitó el triunfo en la casa más popular de Guadalix de la Sierra.
Aunque han pasado 25 años desde entonces, su nombre ha vuelto a protagonizar la actualidad mediática tras conocerse que mantiene una gran deuda, según desvela Semana este miércoles, 29 de enero.
Para entender esta parte de la historia es necesario hacer un repaso de la trayectoria profesional del exparticipante gaditano. Después de haberse coronado ganador de GH en el año 2000, Ismael continuó vinculado a la pequeña pantalla participando en otros formatos como La isla de los famosos.
El accidente que marcó un antes y un después
En el año 2004, su vida dio un giro de 180 grados tras sufrir un trágico accidente de tráfico mientras conducía su moto por Cádiz, su localidad natal. Las consecuencias del suceso fueron tales que sufrió múltiples fracturas y estuvo durante 42 días en coma. Sin duda, este capítulo en su vida marcó un antes y un después.
El incidente provocó que este se alejara de la pequeña pantalla, aunque, después de haberse recuperado, quiso continuar su vida profesional embarcándose en un nuevo ámbito. De esta manera, se lanzó al mundo de la política, presentándose como alcalde de su localidad natal.
Aunque la cosa no llegó a buen puerto, aquella aventura le hizo poner en marcha varios proyectos con diferentes profesionales, entre ellos Jesús Toledo, con quien tiene una deuda de 18.000 euros, según desvela a Semana.
La historia de su gran deuda
De acuerdo con el testimonio de Jesús Toledo, todo empezó “en febrero del 2023, cuando se conocieron en un coro durante los carnavales de Cádiz”. Después de entablar una buena conversación, ambos establecieron una relación laboral. “Creamos algo didáctico que a Ismael le entusiasmó, pero lo que en un principio me pareció un proyecto distinto, al cabo de unos meses se convirtió en una pesadilla, que me creó una crisis de ansiedad y angustia”, detalla a la revista del corazón.
La “cercanía” y el hecho de que Ismael le transmitió ser una persona “legal y transparente” hicieron que Jesús Toledo depositase su confianza en él. Así, los dos fundaron una productora llamada Puppets, especializada “en la creación y proyectos de marionetas, como los teleñecos de la tele”. “Cuando comenzamos a colaborar, le propuse crear a la típica familia gaditana que contaba sus propios problemas e Ismael se presentaba como la solución a ellos”, expresa a la publicación.
Aunque el proyecto parecía que iba a prosperar satisfactoriamente, lo cierto es que, al poco tiempo, empezaron los problemas. “El primero de ellos se da cuando encargo una de las marionetas a un artesano en Inglaterra y comienza a dilatar los pagos. Como no tenía dinero para sacarla de la aduana, la muñeca se devolvió, creándome un problema con el artesano”. Y es que, según las declaraciones de Jesús Toledo, aunque había pactado un presupuesto con Ismael, este nunca accedió a abonar los 18.000 euros presupuestados y que suponían el 50% del proyecto.
Han pasado dos años desde entonces, pero, a día de hoy, Ismael aún “asegura que nunca” encargó nada a Jesús Toledo. Sin embargo, existen conversaciones donde, claramente, anima al equipo a “continuar con el proyecto”. “Por el momento, me gustaría solucionar esto sin ir a juicio. Nunca hubiera querido ni siquiera contarlo públicamente, pero no me ha dejado más remedio”, admite el entrevistado a Semana, añadiendo que sabe que "hay más afectados, a los que debe una suma de unos 40.000 euros y sí le han judicializado”.