La borrasca ‘Herminia’ ha rebajado sus efectos en Galicia, aunque continúan registrándose desbordamientos de ríos y se mantienen las afecciones tanto en la circulación ferroviaria como en el transporte de ría después de las fuertes lluvias que el domingo llegaron a descargar 187 litros por metro cuadrado en A Estrada (Pontevedra) 173 litros en Casas de Oporto (A Coruña). Sin embargo, también se registraron 154 litros en (Grazalema) y 143 litros Tornavacas (Cáceres). Las rachas de viento más significativas también se produjeron el domingo, con una máxima de 172 kilómetros por hora en el mirador del Cable, en los Picos de Europa de Cantabria. Pero el cielo no da tregua: la borrasca ‘Ivo’ ya se aproxima a la península.
Este martes, queda todavía temporal marítimo importante en las costas gallegas y del Cantábrico, con un fuerte oleaje que puede superar los diez metros. “Es peligroso acercarse a primera línea de costa y, de hecho, tenemos activados los avisos de nivel rojo por peligro extremo por fenómenos costeros”, ha recordado Rubén del Campo, el portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). No obstante, mantienen las alertas por nevadas en León, Soria, Segovia y Ávila, que están en nivel amarillo. El este del país, por su parte, permanece también bajo el nivel de riesgo amarillo por el viento. En la Región de Murcia, Almería y Albacete, podrían superarse los 90 o 100 kilómetros por hora.
Ivo, la nueva borrasca de gran impacto
‘Herminia’ se despide, pero el temporal generalizado continúa. El miércoles llegará a España ‘Ivo’, la novena borrasca de gran impacto de la temporada. Del Campo advierte de que dejará a su paso lluvias abundantes, fuertes vientos y temporal marítimo. Sin embargo, la nieve será la protagonista con un fuerte descenso en la cota de nieve.
Mañana un frente asociado a esta nueva borrasca dejará precipitaciones en buena parte de la península, aunque no llegarán ni al área mediterránea ni a Baleares. “Las lluvias serán abundantes en el oeste peninsular y sobre todo en Galicia”, advierte el meteorólogo, que informa de a partir de los 1.200 metros las nevadas serán copiosas en los Pirineos y en el entorno de la Cordillera Cantábrica, “donde podrán acumularse más de diez centímetros de nieve en menos de 24 horas”.
De nuevo, el viento arreciará con rachas muy fuertes e incluso huracanadas de nuevo en Galicia, el Cantábrico, así como en puntos de Castilla y León y en el resto del territorio, por lo que pide precaución, una recomendación que se extiende a la costa, con olas que podrán superar los siete metros en las costas del norte.
El jueves, tras el paso del frente, “llegará una masa de aire muy frío impulsada por vientos del norte, vientos que además son húmedos y esto dará lugar a precipitaciones persistentes en el extremo norte de la península, mientras que en el resto del territorio habrá posibles chubascos que poco a poco irán quedando más acotados a zonas de montaña”. Y aunque hay incertidumbre al respecto, la cota de nieve podría descender, sobre todo en Galicia, el Cantábrico y Castilla y León, hasta unos 700 metros. Ante esta previsión, pide precaución porque “las vías de comunicación que pasen por estas montañas del norte pueden sufrir alguna dificultad en la movilidad en el tráfico rodado debido a las nevadas”. También podrá nevar en las provincias de Burgos, Soria, Segovia y Ávila.
Un descanso el fin de semana
El viernes ganará terreno un anticiclón que estabilizará la atmósfera y dejará un fin de semana con cielos despejados y sin lluvias, salvo en el noreste y Baleares. Estos cielos despejados y vientos más en calma “harán que bajen las temperaturas nocturnas de forma acusada, así que se producirán heladas de madrugada y por la mañana en amplias zonas del interior peninsular” . Por lo tanto, vuelve el frío invernal después de unos días de temporal “inusualmente cálidos para la época del año”.