Se conoce como osteosarcoma a un tipo de tumor poco común que puede aparecer en los huesos, y que supone el cáncer óseo más común en niños y adolescentes. Se desconoce la causa, pero se trata de un tipo de enfermedad muy agresiva, cuyas tasas de supervivencia se reducen considerablemente cuando se disemina por otras partes del cuerpo, razón por la que una intervención médica temprana puede ser clave.
Por desgracia, esta atención fue precisamente lo que le faltó a Alicia Ortstad, una mujer sueca que ha compartido a través de sus redes sociales la historia de cómo empezaron a aparecer los síntomas de su enfermedad y como recibió una serie de diagnósticos erróneos que resultaron en un progresivo agravamiento de su enfermedad.
Primero paracetamol y más tarde cortisona
Tal y como cuenta el periódico estadounidense The independent, Alicia tenía 19 años cuando empezaron los dolores, en verano de 2023. Su pierna se había hinchado y le costaba mucho más moverla, por lo que decidió ir al médico. “Simplemente me dijeron que descansara y me recetaron paracetamol”, asegura según el citado medio, “pero la cosa empeoró”.
Ella pidió que le hicieran una resonancia magnética, pero fue ignorada por el sanitario. Cuando el dolor fue a más, de nuevo se encontró con una negativa, y los doctores optaron por inyectarle cortisona en la zona (utilizada en múltiples terapias contra enfermedades de diferente tipo) y así aliviar el dolor.
En un vídeo de TikTok, Alicia enumera ahora los síntomas que tenía y que los médicos descartaron. “Siempre me sentía cansada, sin importar cuánto durmiera”, cuenta. “Enfermaba más de lo normal: tenía fiebre alta muy a menudo y también faringitis estreptocócica muchas veces”. Explica, también, que le costaba concentrarse en la universidad y que incluso llegó a quedarse dormida, algo que no le había ocurrido nunca. “Ya no podía beber alcohol sin las peores resacas. Incluso las copas más pequeñas”.
Sin embargo, lo más insoportable era el dolor. “Me dolía mucho cuando me relajaba, no tanto cuando estaba activa, sobre todo cuando descansaba”. El mismo dolor que volvía de noche, y que cada vez era más intenso. “Ningún analgésico, ni siquiera la morfina, funcionaba”, narra. “El dolor era peor por la noche y me afectaba al sueño”. Y, además, un bulto cada vez más grande y duro se iba extendiendo por su pierna, hasta que el cáncer que tenía comenzó a ser evidente.
El diagnóstico final y la operación
No fue hasta diciembre de 2023 que los médicos decidieron hacerle una resonancia magnética, la cual descubrió el osteosarcoma. Desgraciadamente, el diagnóstico había llegado demasiado tarde, y la única manera de salvarle la vida a Alicia era con una amputación de la pierna para que el cáncer no se propagara, algo que se produjo en octubre de 2024.
@aliciaortstad Replying to @my dog2020 Jag har iallafall inte ont längre…🥰 #amputee #prostheticleg #amputeegirl #oneleg #cancerfighter #ostesarcoma ♬ WAR IS OVERRR - sarah🦇
“Ahora que miro hacia atrás, hay muchas señales que ignoré por completo y que ahora sé que eran indicaciones de que algo andaba mal conmigo”, cuenta a The Independent. En su cuenta de TikTok, por el contrario, recuerda a sus seguidores que escuchen su cuerpo si ven que, en el fondo, saben que algo no va bien. “Sé insistente con los médicos, pueden ser ignorantes y en mi caso no estar informados sobre ese tipo de cáncer”, responde. “Conoce tus derechos y lucha por ellos”.