España enfrenta un temporal que ha causado tres heridos y cerca de 170 incidencias en Galicia: se mantiene la alerta meteorológica

Un fuerte temporal ha azotado Galicia desde el viernes, generando dos heridos y unas 170 incidencias en toda la comunidad autónoma, según ha informado el servicio de emergencias 112 de Galicia. Las provincias más afectadas han sido A Coruña, con 88 incidentes registrados, y Lugo, con 46. Les siguen Pontevedra con 25 y Ourense con tres. Entre las localidades más perjudicadas destacan Narón, en A Coruña, con ocho incidencias, y Foz, en Lugo, con nueve.

Los principales problemas derivados del temporal han estado relacionados con la caída de árboles y ramas en las carreteras, lo que motivó 57 intervenciones. Además, se han notificado 39 casos de objetos desplazados por los fuertes vientos, 24 incidentes relacionados con obstáculos en las vías y 10 derrumbes.

El temporal no solo ha causado daños materiales, sino también personales. En Viveiro, provincia de Lugo, una caseta arrastrada por el viento ha impactado contra una madre y su hija alrededor de las 15.45 horas, ocasionándoles traumatismos. Ambas han sido trasladadas al hospital de Burela para recibir atención médica.

En otro incidente, en A Laracha, provincia de A Coruña, un conductor ha resultado herido tras salirse de la vía al intentar esquivar un contenedor que había sido desplazado por el viento. Por otro lado, en Xermade, también en Lugo, una marquesina arrancada por las ráfagas ha caído sobre un vehículo estacionado, causando daños materiales, aunque no se han registrado heridos.

Ante la persistencia del temporal, el Ayuntamiento de Vigo ha decidido cerrar varios parques públicos, entre ellos O Castro, Castrelos y A Riouxa, como medida preventiva. Estas restricciones buscan garantizar la serguridad de la población mientras continúe activa la alerta meteorológica.

En paralelo, la Xunta de Galicia ha activado el Plan Inungal, un protocolo especial de protección civil diseñado para gestionar riesgos de inundaciones. Las estaciones de medición en los ríos Xallas y Dubra Tambre han registrado niveles superiores a los umbrales de seguimiento establecidos, lo que incrementa el riesgo de desbordamientos puntuales. Las autoridades han instado a la población a adoptar medidas de autoprotección para minimizar posibles riesgos.

Las condiciones meteorológicas en la península ibérica estarán marcadas este sábado por la llegada de un frente vinculado a la borrasca Éowyn, que provocará precipitaciones generalizadas, nevadas en zonas montañosas y rachas de viento intensas en varias regiones costeras. Según la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET), el frente avanzará de oeste a este, dejando a su paso un panorama de inestabilidad que afectará principalmente al noroeste peninsular y otras áreas del interior.

Las lluvias serán más intensas en el noroeste de la península, el oeste del sistema Central y el Pirineo occidental. En estas zonas, además, podrían registrarse tormentas ocasionales, especialmente en Galicia, donde se espera una mayor probabilidad de actividad tormentosa. En cuanto a las nevadas, estas se concentrarán en las montañas de la mitad norte, con una cota que oscilará entre los 1.500 y 1.800 metros, aunque en el noroeste descenderá hasta los 1.100-1.300 metros.

Mientras tanto, en el archipiélago canario, los chubascos se limitarán a la mitad este de las islas, sin que se prevean cambios significativos en las temperaturas. Los vientos alisios continuarán soplando en la región, manteniendo una situación meteorológica más estable en comparación con la península. Por su parte, en las Islas Baleares, las nieblas matinales densas serán el fenómeno más destacado, aunque no se esperan precipitaciones en esta zona, donde predominarán los cielos despejados.

En cuanto a las temperaturas, la AEMET ha detallado que las máximas experimentarán un descenso en la mayor parte de la península, con la excepción de los litorales del este, donde apenas se registrarán cambios. Las mínimas, por otro lado, subirán ligeramente en Baleares, se mantendrán estables en el este y sureste peninsulares, y descenderán en el resto del territorio. Este descenso favorecerá la aparición de heladas débiles en las montañas de la mitad norte, que serán más intensas en los Pirineos.

A medida que el frente avance hacia el este, las precipitaciones tenderán a cesar y los cielos comenzarán a despejarse. No obstante, según el pronóstico de la AEMET, no se espera que el frente alcance la costa este de la península, donde predominarán condiciones de estabilidad atmosférica.

*Con información de Europa Press y EFE.