El sindicato Jupol ha dado un paso adelante y ha declarado un nuevo conflicto colectivo al Ministerio del Interior. El último acontecimiento que les ha empujado a tomar esta decisión es la subida salarial de 4.200 euros al año a los agentes de la Eirtzantza, que aumenta la brecha económica entre las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y las policías autonómicas o locales.
No obstante, los motivos en esencia por los que adoptan la mayor medida de presión sindical en la Policía Nacional tienen que ver con sus principales reclamaciones, la jubilación digna -previo reconocimiento como profesión de riesgo- y la plena equiparación salarial. Desde Jupol denuncian que “la negociación colectiva” es “nula” e “inexistente” y no hay avances en estas materias.
Hace pocas semanas, Jupol denunció la “actitud vengativa” de la Jefatura Superior de Policía de Valencia al dejar en sólo seis las propuestas de medalla a agentes por su labor en las labores de rescate y recuperación de la DANA. El rechazo a premiar el papel de decenas de agentes se produjo después de que el sindicato denunciase la intención del jefe superior de Valencia de condecorar a varios altos cargos de la Jefatura.
La declaración del conflicto colectivo implica que los cuatro vocales de Jupol en el Consejo de Policía no se sentarán provisionalmente en las próximas reuniones de este órgano de negociación con el Ministerio del Interior y la Dirección General de Policía. Así, Jupol, que ya había declarado sendos conflictos colectivos en 2019 y 2022, se suma en esta ocasión a otros sindicatos como la Confederación Española de Policía (CEP) y Equiparación YA (EYA), que se mantienen en esta postura desde 2024.
El secretario general de JUPOL, Aarón Rivero ha indicado que “desde el sindicato mayoritario en la Policía Nacional nos vemos en la obligación de dar este paso y plantear el conflicto colectivo en el seno de la Policía Nacional debido a la nula e inexistente negociación colectiva en el Consejo de Policía”.
“Le recordamos a la Dirección”, continua Rivero “que en el Consejo no solo negocia nuestra jornada laboral, nuestros salarios o la carrera profesional, lo que hace es negociar con nuestras vidas y por tanto le insistimos en que Jupol no ha llegado a la Policía Nacional para ser servilista con la Administración, y no va a ceder en la defensa de los derechos y las mejoras en las condiciones laborales de los compañeros a cambio de migajas”.
El pasado 19 de enero, el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, anunció que había dado la orden de crear un “grupo de trabajo” para declarar a los policías nacionales y guardias civiles como profesionales “de riesgo”, lo que afectaría “exclusivamente a los criterios para la determinación de las pensiones en caso de jubilación anticipada”. Casi un año después, ese grupo de trabajo no ha dado resultados y todo parece estar a merced de la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado de 2025.
La plena equiparación salarial de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado con las policías autonómicas y locales es la otra principal reivindicación de los sindicatos de la Policía Nacional y las asociaciones de la Guardia Civil. Aunque en 2018 cuatro sindicatos policiales firmaron con el exministro del Interior Juan Ignacio Zoido (PP) un acuerdo histórico por la equiparación, hasta la fecha el incremento salarial de los agentes no ha superado el 40 %.