Carlos Iglesias de la Cueva, hermano del icónico cantante Julio Iglesias, ha sido una figura clave tanto en el mundo inmobiliario como en la medicina. Sin embargo, su reputación se vio empañada en 2023, cuando fue condenado por la Audiencia Provincial de Madrid a seis meses de cárcel y a abonar cerca de treinta millones de euros por defraudar 19 millones a Hacienda en el ejercicio fiscal de 2001. Según informó el diario ABC en su momento, el delito está relacionado con la venta de terrenos en Vicálvaro, cuya transacción no fue declarada correctamente debido a que alegó tener residencia fiscal en Panamá.
Éxito profesional y caída judicial
Carlos Iglesias destacó en el mundo de la medicina como jefe de cirugía mamaria en un hospital de Madrid. Allí, además de desarrollar su carrera, conoció a su esposa, Carmen Domínguez, quien fue una de sus pacientes. La pareja tuvo tres hijos que, como su padre, han orientado su vida profesional hacia el sector inmobiliario.
En 1979, decidió dar un giro a su vida y abandonó la medicina para mudarse a Miami y convertirse en el mánager de su hermano Julio Iglesias, pasando a ser su mano derecha. Durante esos años, se encargó de gestionar su carrera y ser su principal confidente. Su cercanía fue tal que Julio lo nombró padrino de su primogénita, Chabeli Iglesias Preysler.
No obstante, su reputación empezó a caer cuando se tuvo que enfrentar a una situación complicada tras ser hallado culpable de un delito fiscal. Los magistrados determinaron que la venta de los terrenos en 2001 fue declarada en el Impuesto de Sociedades de manera fraudulenta, intentando beneficiarse de una residencia fiscal en Panamá. A pesar de la defensa de su abogado, José Antonio Choclán, la sentencia fue ratificada y Carlos deberá hacer frente a la elevada deuda.
La infancia de los Iglesias y su conexión con Miami
Carlos y Julio nacieron del matrimonio entre Julio Iglesias Puga, un reconocido ginecólogo, y Charo de la Cueva. Los hermanos crecieron en un cómodo piso en el barrio de Argüelles, en Madrid, disfrutando de una vida tranquila hasta la separación de sus padres en 1983.
En 1981, el hermano del cantante vivió uno de los episodios más dramáticos de su vida cuando tuvo que viajar de Miami a España para mediar en el secuestro de su padre a manos de ETA. El doctor Iglesias fue liberado veinte días después por el Grupo Especial de Operaciones (GEO) sin que se efectuara pago alguno.
Aunque Carlos mantiene una relación más distante con sus hermanos menores, su lazo con Julio siempre ha sido estrecho. Este vínculo se reflejó también en la crianza de sus hijos, quienes convivieron en Miami con los hijos de Julio e Isabel Preysler, Chabeli, Julio José y Enrique Iglesias.
Hoy en día, los tres hijos de Carlos Iglesias están vinculados al sector inmobiliario en Estados Unidos, aunque conservan una conexión con España. Su hija menor, Marta, celebró su boda en Marbella, donde su padre tuvo un papel destacado como padrino.