La DGT instala 24 nuevos radares por toda España: dónde están y cómo son

La Dirección General de Tráfico (DGT) ha puesto en funcionamiento 24 nuevos radares en distintas zonas de España. De ellos, 17 son fijos y siete de tramo, según anunció el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, durante una visita al Centro de Denuncias Automatizadas de la DGT ubicado en León.

Estos nuevos puntos de control de velocidad han sido instalados en provincias del norte, este y sur de la Península. En concreto, afectan a A Coruña, Asturias, Lugo, Ourense, Pontevedra, Almería, Málaga, Granada, Alicante y Valencia. Como es habitual, las ubicaciones están debidamente señalizadas en las carreteras y publicadas en la página web de la DGT. Además, la información ha sido proporcionada a los operadores de navegadores para que los conductores puedan localizarlos fácilmente.

Durante el primer mes de operatividad, los conductores que excedan los límites de velocidad en las zonas controladas por estos nuevos radares recibirán una carta informativa. En esta se les advertirá de que han sido captados por un radar y que han sobrepasado la velocidad permitida. Pasado este periodo, los excesos de velocidad serán sancionados con multas correspondientes al importe establecido por la normativa vigente.

A continuación, un listado de en qué carreteras han sido instalados los radares:

• A-1050
• AL-3117
• A-370

• N-432

• A-7054
• MA-20

• AC-221
• AC-841
• AC-552

• N-634
• GJ-10
• AS-112

• LU-862

• N-525
• OU-536

• N-550

• N-332
• CV-86
• CV-905
• A-77a

• A-3
• V-31
• CV-410
• V-23

Los radares de tramo se han convertido en una herramienta clave para el control de la velocidad en las carreteras españolas. Su popularidad ha ido en aumento y su eficacia está ampliamente reconocida. La DGT y varios ayuntamientos, incluyendo el de Madrid, han implementado estos dispositivos para mejorar la seguridad vial.

Estos dispositivos se diferencian de los radares convencionales en que no sólo miden la velocidad en un punto específico, sino a lo largo de un tramo de carretera que puede superar los 30 kilómetros. El sistema funciona gracias a una serie de cámaras, donde una registra la entrada del vehículo al tramo y otra la salida. La velocidad media se calcula en tiempo real y, si se excede el límite permitido, se genera automáticamente una denuncia.

En 2025 se cumplen dos décadas desde la implementación del primer plan de radares fijos en España. Esta medida, junto con otras iniciativas, ha contribuido a reducir en un 75% el número de víctimas mortales en accidentes de tráfico durante este tiempo.

El Plan Estratégico de Seguridad Vial 2005-2008 de la DGT, alineado con las recomendaciones de organismos internacionales como la OCDE, la OMS y la Unión Europea, estableció la instalación de 500 secciones fijas de control de velocidad. Estas se complementaron con 300 cinemómetros móviles operados por la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil. Desde entonces, los puntos de control de velocidad han sido fundamentales para reducir la siniestralidad, ya que la velocidad inadecuada sigue siendo un factor presente en el 21% de los accidentes mortales.