El pueblo que ha bajado impuestos a sus habitantes los últimos 10 años: esto es lo que hizo su alcalde

Uno de los deseos que todo ciudadano de a pie tiene es el histórico acontecimiento de ver reducidos los impuestos y no el verlos subir gradualmente. Aunque esto es un hecho aislado y en forma de utopía, es cierto que algunas personas tienen la suerte de vivirlo en sus municipios. Este ha sido el caso de Geneviève y Dominique, una pareja francesa que consigue ahorrar unos 70 euros en una contribución local. “Este año ha bajado un 1,11%. Al año siguiente, bajó un 2,89%. Y el año siguiente, menos 2,81%”, explican en el reportaje que ha realizado el medio galo de TF1.

Hablamos del municipio de Basse-Goulaine (Loira-Atlántico), que ha conseguido algo tan difícil como bajar gradualmente con el paso de los años el pago de un impuesto local. Sin embargo, este no es un hecho reciente, según ha conformado la pareja, esto sucede desde hace al menos 10 años. “Nos hace ganar más dinero. Y para todo el municipio, para todos los habitantes de Basse-Goulaine”, explican contentos con la gestión de Alain Vey, alcalde la villa.

Lejos de una visión recaudadora, el mandatario del consistorio ha querido ayudar a sus vecinos a pagar menos cantidad de este impuesto local. El presupuesto de esta región es de 14 millones de euros para sus gestiones y sus cerca de 10.000 habitantes. Con la recaudación de esa tasa municipal, recaudan alrededor de 7 millones, es decir, la mitad del registro anual de gasto prevista por al ayuntamiento. “Creo que somos unos privilegiados”, confirma alegre Geneviève.

A la pregunta de una explicación de como ha conseguido bajar los impuestos, Vey lo tiene claro. “No hay una fórmula mágica”, dice. “Es un proceso a largo plazo, y es sobre todo en los gastos de funcionamiento donde podemos actuar. Hemos tenido que renovar edificios para ahorrar energía”, añade el alcalde.

Además, muestra su carácter servicial y de honradez, al menos de cara al público, aunque los hechos le avalan. “Estamos aquí para servir a la población”, sustenta. “No hay que olvidar que gestionamos un dinero que no nos pertenece. Es dinero que pertenece a nuestros conciudadanos, añade para mostrar que él quiere lo mejor para su pueblo y sus convecinos.

A pesar de esa renuncia de 150.000 euros en forma de impuestos, el pueblo ha experimentado un crecimiento en lo económico desde el 2007. Tal es el asunto, que desde ese año no ha pedido ningún préstamo, algo que hace más fuerte la situación financiera de la localidad. Sin embargo, sí que se han acometido fuertes operaciones en forma de inversiones en la villa.

Por tanto, nuevas edificaciones y mejoras se han dado en todo el municipio, algo que eleva el nivel de agrado entre los habitantes. Una de esas novedades es la construcción de una zona deportiva, por valor de más de tres millones de euros. “Lo que lo hace especial es que tenemos nueve pistas de bádminton. También tenemos un rocódromo”, describe el alcalde para sacar músculo orgulloso de su centro deportivo.