Las alarmas saltaron en mayo de 2024. Un comunicado de la empresa Stellantis, responsable de la fabricación de los coches Citroën, advertía a los conductores de los modelos C3 y DS 3 que dejaran de conducir sus vehículos hasta nueva orden. La razón, un fallo en los airbags Takata, una empresa japonesa que quebró a raíz de esta noticia. Marcas como Volkswagen, SEAT o Audi también han procedido a la retirada de estos dispositivos de seguridad.
Según el comunicado de la empresa Stellantis, el defecto de estos airbags estaría causado por unos productos químicos presentes en el sistema de inflado que “pueden deteriorarse con el tiempo”, sobre todo si se exponen a “condiciones climáticas calurosas y humedad”.
Los airbags son los dispositivos de seguridad que protegen a los ocupantes del vehículo tras recibir un impacto. Estas bolsas de aire se activan en accidentes con el objetivo de absorber la energía y reducir las posibles lesiones que ocasione el golpe. Actualmente, todos los coches deben incorporar, al menos, seis airbags: dos delanteros, dos laterales y dos de cortina.
¿Cuántos vehículos están afectados?
En concreto, el Grupo Stellantis ha informado que los fallos son en los coches Citroën C3 fase 2 y Citroën DS3, construidos entre 2009 y 2017. Es decir, aproximadamente medio millón de vehículos repartidos por Europa, África y Oriente Próximo.
Todos los propietarios de los vehículos con este dispositivo ya han sido notificados mediante una carta donde se explicaba las instrucciones a seguir para reemplazar los airbags. Además, se les ha ofrecido opciones de movilidad alternativas que correrán a cargo de la empresa.
Particularmente, en España se incautarán cerca de 66.000 unidades, y en Francia 73.000. Según Soymotor el fallo en estos sistemas de seguridad habían causado la muerte de 24 personas y más de 250 heridos graves en todo el mundo. El fabricante aseguró que “la seguridad y el bienestar de sus clientes es su máxima prioridad” y que se mantendrá en “contacto constante con las autoridades pertinentes”.
Indemnizaciones
La organización FACUA-Consumidores en Acción ha indicado que todos los afectados por un fallo de seguridad de los airbags Takata podrán reclamar daños y perjuicios, independientemente de si los vehículos estaban en garantía o no.
El artículo 1.101 del Código Civil expone que “quedan sujetos a la indemnización de los daños y perjuicios causados, los que en el cumplimiento de sus obligaciones incurrieren en dolor, negligencia o morosidad, y los que de cualquier modo contravinieren al tenor de aquellas”. Es decir, la empresa debe responsabilizarse de las consecuencias indemnizatorias que surgen del incumplimiento de cualquier obligación, como en este caso la seguridad en la construcción de los airbags.
Entre los daños que se pueden reclamar están los billetes o abonos del transporte público que se hayan tenido que adquirir por la imposibilidad de usar el vehículo propio o los tickets del taxi o facturas de alquiler de coches que se hayan cogido mientras la compañía arreglaba los desperfectos del airbag.
Por otra parte, la compañía ha subrayado que ya ha reparado “más de 94% de los coches matriculados en el sur de Europa”, lo que equivale a 400.000 coches.